Tras casi dos años de proceso, es incierto si la paz está cerca
Sin embargo, tomando en cuenta las diferencias que aún existen entre Gobierno y Farc, que aún faltan otras tres delegaciones de 12 víctimas por escuchar, también se puede pensar que el acuerdo sobre este punto puede llegar después de pasado el mes de diciembre de este año.
Por ahora se conocen las propuestas de las Farc en este tema, de las cuales se establecieron 10 principios básicos sobre los cuales se trabajará. Estos consisten en los temas fundamentales formulados en los foros sobre y con las víctimas realizados por la ONU y la Universidad Nacional en algunas ciudades del país.
Principios básicos y participación de víctimas
El primero de ellos consiste en "reconocer a todas las víctimas del conflicto, no solo en su condición de víctimas, sino también y, principalmente, en su condición de ciudadanos con derechos". En esta medida, no sólo se debería reconocer a las víctimas de la violencia que hay desde los años 30 del siglo XX, sino también a los victimarios que las han afectado.
Esto implica establecer una clara diferencia entre las personas combatientes y las que no lo son, considerando víctimas reales a quienes han sido perjudicados sin serlo, así como a los combatientes a quienes se les ha violado el Derecho Internacional Humanitario definido por la Convención de Ginebra.
El segundo principio establece que "no habrá intercambio de impunidades", queriendo decir con esto que cada parte deberá reconocer su responsabilidad por cada víctima del conflicto armado. En los casos donde se considere que haya habido impunidad se buscarán acuerdos para evitar que ésta continúe.
El tercer principio consiste en garantizar la satisfacción de los derechos de todas las víctimas. Es decir, que lo que se negocia en La Habana no es si se satisfacen o no sus derechos, sino los mecanismos que se implementarán para ello.
El cuarto principio no solo busca que las víctimas sean partícipes de todo proceso que involucre su tratamiento y reparación, sino también el reconocimiento especial de mujeres y comunidades minoritarias como las indígenas, afrodescendientes, campesinas y Lgbti como, excluidas históricamente a quienes se les brindará atención especial.
Esto ya se ha implementado no sólo con la selección de una delegación de 60 víctimas del conflicto armado que viajarán en cinco grupos a La Habana para plantear sus puntos vista, sino también con la creación de una subcomisión de género que busca el reconocimiento de las mujeres y comunidades Lgbti como víctimas directas e indirectas de la violencia.
El quinto principio también ayuda a garantizar esto mediante el trabajo de la Comisión Histórica sobre el Conflicto, recientemente creada en La Habana, la cual establecerá mediante la investigación, no sólo las responsabilidades de las partes que han hecho parte del conflicto en forma directa sino también de la forma en que actores externos han influido sobre éste. Esto se hará mediante una Comisión de la Verdad, cuyo mandato deba ser acatado por las partes.
El acuerdo final no está tan cerca
Los principios 6, 7 y 8 hablan sobre las formas de reparar a las víctimas del conflicto, así como la protección y garantías de no repetición que se brindarán, una vez firmado el acuerdo final de paz. Sobre estos puntos en específico no se ha escuchado ningún pronunciamiento de las partes hasta el momento, lo cual da a suponer que no se han discutido a profundidad en la Mesa de Conversaciones.
Tampoco se han hecho pronunciamientos sobre el principio número 9 que habla sobre la reconciliación ni sobre el 10 que habla respecto al trabajo en común con víctimas y victimarios por parte del Estado, para construir una sociedad que garantice el cumplimiento de los Derechos Humanos para todas las personas.
Mientras la delegación del Gobierno Nacional se ha mantenido cerrada en este sentido, la guerrilla va mostrando en sus declaraciones, un atisbo de lo que se ha discutido en la Mesa de Conversaciones.
Por un lado, en Colombia durante su gira para promocionar el proceso de paz, un representante del Gobierno aseguró: "estamos en la mitad del proceso" y que sólo faltaba concretar unos detalles para llegar al último punto. Sin embargo, Rodrigo Granda, alias 'Ricardo Téllez', advirtió ante los medios extranjeros que "no estamos cerca del final del conflicto".
Por el contrario, Granda aseguró que siendo el tema de las víctimas tan delicado y sabiendo que "el Gobierno no ha dejado de atacar con sus Fuerzas Militares, es muy difícil que estemos cerca de un final para el conflicto armado".
Sobre este tema opinó el profesor Carlos Eduardo Jaramillo, quien fue consejero presidencial de paz durante el gobierno de César Gaviria. Según él, "para que se pueda cerrar este proceso de una forma integral, es necesario conocer las causas históricas del conflicto armado y eso parece estarlo entendiendo el Gobierno al crear una Comisión Histórica para el fin del conflicto”.
El profesor Jaramillo aseguró que durante los últimos 50 años de conflicto armado "las víctimas vienen de diversos sectores, porque no sólo la guerrilla ha estado metida en el conflicto armado". Según él, "hasta que no se evalúe que tanta responsabilidad le cabe a la guerrilla, al Estado y a los paramilitares, no estará claro quién o cómo se va a reparar a las víctimas". Aseguró que el proceso de paz consiste en "generar un espacio para que todas las víctimas y victimarios se encuentren y establezcan qué es lo que realmente ha pasado".
Esta opinión fue respaldada por Luis Eduardo Celis, investigador de la Fundación Paz y Reconciliación, quien afirmó que los tres temas que ya se dejaron de tocar en La Habana no están completamente acordados.
Él recuerda que sobre estos temas siempre se ha dicho al final de la discusión que lo alcanzado son "acuerdos parciales". En este sentido, Celis afirma que no se puede olvidar que el mismo presidente Juan Manuel Santos ha dicho que "nada está acordado hasta que todo esté acordado" y que la guerrilla ha sido enfática en eso.
Tomando en cuenta lo anterior, Luis Eduardo Celis aseguró que “para la firma de un acuerdo final faltarían cerca de dos años”, porque además de resolver esos temas pendientes, es necesario definir claramente los mecanismos para que haya verdad, justicia y reparación. A pesar de esto, Celis destacó que "lo bueno es que temas como la dejación de armas y el fin del conflicto armado, ya se empezaron a discutir".