Agenda del Congreso: entre extras y pupitrazo
Como ya es tradición en el Congreso de la República, las últimas semanas de este periodo de sesiones ordinarias, que van hasta el 16 de diciembre, se empiezan a apretar debido al trámite de las reformas constitucionales y leyes, en especial las de interés particular del Gobierno.
A tres semanas del final asegurar que es inminente que se llamará a sesiones extraordinarias es apresurado, pero esa posibilidad es casi un hecho, tanto para unos días adicionales en diciembre como en febrero para empezar a tramitar el nuevo plan nacional de desarrollo, el cual llevará el Gobierno Nacional a consideración del Legislativo en ese mes.
Para lo que resta de esta legislatura la mayor atención está centrada en reformas, tanto las constitucionales como las de ley.
La primera enmienda constitucional que ya lleva 3 de los 8 debates que debe cumplir es la llamada reforma del equilibrio de poderes, la cual tiene cono fundamento la eliminación de la reelección presidencial.
La reforma que terminó esta semana su tercer debate en la Comisión Primera de la Cámara, tendrá en la primera semana de diciembre, ya en la plenaria, su cuarta votación, para cumplir así su primera vuelta en la legislatura, porque de lo contrario no podrá aprobarse.
Una reforma constitucional más es la del fuero militar, este proyecto ya tuvo sus dos votaciones en el Senado y se está por iniciar su trámite en la Cámara de Representantes. Para que no se hunda tendrá que ser discutida tanto en comisión como en plenaria máximo hasta el 16 de diciembre.
La misma suerte, pero en el Senado, tendrá que cumplir la enmienda constitucional de la unificación de periodos, la norma que busca ampliar el mandato de los actuales alcaldes y gobernadores para que coincidan con el tiempo de mandato del Presidente de la República.
Contrario al fuero militar que se prevé será aprobado en la Cámara, la unificación de periodos en el Senado ha sido advertido, por diferentes bancadas, que no será aprobado y su hundimiento se da como un hecho. Sin embargo, se debe esperar su discusión que arrancaría la semana próxima.
Es decir, solo con esos tres proyectos cuyos alcances son significativos, los congresistas ya deberán apretar el paso, lo que hace que se empiece a asomar el riesgo de que el pupitrazo tenga lugar.
Sin embargo, la atención también está centrada en otras iniciativas como la reforma tributaria, que esta semana tuvo la ponencia lista y que se espera que sea votada los días que vienen en las comisiones Tercera y Cuarta del Senado y Cámara, que están sesionando de manera conjunta con ese propósito.
Ese ‘corre corre’ hará que las plenarias tengan que apretar el paso, porque en sus manos estará el que se cumpla la agenda del Gobierno, que si no sale avante, pondrá a tambalear las bases de la Unidad Nacional.
El proyecto que reforma el sistema de regalías, determinante para Santander, ya salió de la Cámara y llega al Senado, donde también tendrá que ir a contra reloj.