11 años después, tragedia por inundación del 12 de febrero no termina
En ese entonces no hacía el intenso sol que hoy nos sofoca a todos los santandereanos.
¡Por el contrario!
Aquel 12 de febrero, en un día como hoy, las ‘cataratas del cielo’ se abrieron y arreciaron contra las familias más indefensas.
Durante 14 horas seguidas cayó toda el agua que históricamente llovía en el área metropolitana de Bucaramanga, durante los meses de febrero y marzo juntos.
Las bravas aguas del Río de Oro se desbordaron y arrasaron con 5 mil viviendas y dejaron 30 mil damnificados.
Los datos oficiales confirmaron que murieron 54 personas y que 108 más sufrieron heridas de relativa consideración. Sin embargo, el número exacto de víctimas jamás se sabrá.
En Bucaramanga, el fuerte aguacero afectó a 18 barrios y, de paso, también enmudeció a centenares de hogares de Girón.
Las poblaciones de otros 22 municipios de Santander también tuvieron secuelas del temporal.
Denuncia
Once años después de aquella tragedia, 108 familias alegan que siguen a la deriva. Algunas de ellas decidieron regresar al sitio de la tragedia, ante la falta de una habitación digna.
“Como no nos dieron soluciones de vivienda, al principio nos tocó pagar arriendo. Luego, con semejante crisis económica, a mi familia y a mí no nos quedó de otra que improvisar un nuevo rancho. Usted sabe que uno debe seguir enfrentando la vida”, dijo Juan Luis Torres, damnificado de aquella época, quien improvisó su morada en el margen del Río de Oro.
Más allá de la necesidad de estos hogares, la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, Cdmb, advirtió sobre el peligro que representa la consolidación de más invasiones en dicha zona.
Porque así estemos atravesando por un intenso verano y las aguas del afluente no representen una voz de alerta de inundación, cuando lleguen las lluvias el problema será peor.
Lo anterior sin contar que quienes invadieron esas áreas se exponen a enfermedades infectocontagiosas.