Bucaramanga
Contraloría General encontró 26 hallazgos en gestión de la Alcaldía de Bucaramanga en 2016
Un reciente informe de auditoría de la Contraloría General de la República detectó 26 hallazgos administrativos en la gestión de la Alcaldía de Bucaramanga de los recursos del Sistema General de Participaciones (SGP) para la vigencia 2016.
De estos hallazgos, 12 son de presunta incidencia disciplinaria, tres tendrían incidencia fiscal por $2.023 millones, tres llevaron al inicio de una indagación preliminar y una más tendría incidencia penal.
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Según el ente de control, hubo problemas en la gestión y planeación de los recursos, lo que llevó a una baja ejecución de estos (solo 52,28% en el primer año de gobierno de la actual administración)
Por ello, la Contraloría advirtió que se determina un concepto de incumplimiento material - con conclusión ‘Adversa’.
Al respecto, la Alcaldía indicó que la gestión de los recursos del SGP se hizo de acuerdo con la norma y algunos problemas vendrían heredados de administraciones anteriores.
Cabe destacar que esta auditoría le hizo seguimiento a los recursos del Sistema General de Participaciones, es decir, los que vienen de la Nación para financiar proyectos de Educación y Salud, principalmente. La mayoría tienen una destinación específica, es decir, ya está estipulado para qué se deben usar.
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Faltante en tesorería
Según la Contraloría, uno de los principales hallazgos es un faltante de fondos de tesorería de $1.666.941.025 al cierre presupuestal de 2016, sobre lo que no hay documentos suficientes que lo justifiquen. Esto denota debilidades en los procedimientos presupuestales, de tesorería y contables.
Este hallazgo tendría incidencia disciplinaria, penal y fiscal.
Al respecto, la Alcaldía dijo que en ese caso el problema viene del gobierno anterior, pues para la vigencia 2015 había un déficit de fondos de tesorería de $1.700 millones.
En ese sentido, parte de los recursos del SGP de 2016 se usaron para destinación específica y para el pago de compromisos de vigencias anteriores.
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Además, hay $793 millones del superávit de 2015 que “no se incluyeron en el presupuesto de 2016, dado que no existían en las cuentas bancarias de tesorería a 31 de diciembre de 2015”. No obstante, según el ente de control, no se allegaron los soportes de las investigaciones internas o acciones realizadas por este hecho.
La Secretaría de Hacienda dijo, por otro lado, que para la vigencia 2016 hay una diferencia de $832 millones por un déficit de 2015 que está en conciliación por la Secretaría de Educación.
Plan de mejoramiento
El Jefe de Gobernanza, Manolo Azuero, indicó que luego del informe de auditoría, la Alcaldía diseñó un plan de mejoramiento que fue presentado ante la Contraloría General de la República.
Entre las medidas que se están implementando están: realizar periódicamente conciliaciones presupuestales, aumentar los controles en el pago de nómina, incorporar las reservas presupuestales al Presupuesto del siguiente año, requerir a los rectores y acompañarlos para que cumplan las normas, optimizar la ejecución del presupuesto en salud, educación y primera infancia, y adelantar los procesos contractuales pendientes para los centros de salud.
Poca inversión en PRIMERA INFANCIA
La Contraloría encontró que no se ejecutaron los recursos SGP para la Primera Infancia, asignados en el Conpes 3861 de 2016 por $466 millones y saldos anteriores de Conpes de los años 2008, 2009, 2013 y 2015 que suman $2.713 millones.
Según el ente de control, de 123 metas de producto del Plan Municipal de Desarrollo en lo que se refiere a atención a los menores de edad, hay 26 que corresponden a la Primera Infancia, de los cuales 13 tenían un 50% de cumplimiento.
Esto conformó un hallazgo por falta de planeación y gestión por parte de la Alcaldía, que terminó afectando a una de las poblaciones más vulnerables.
Pae sí cumplió
En el caso de Bucaramanga, no hubo hallazgos administrativos por la alimentación escolar, aunque sí se advirtió que las raciones no se comenzaron a distribuir desde el primer día de clases. Según la Contraloría, el contrato se cumplió y las raciones fueron entregadas de forma satisfactoria.
Control interno
Según la Contraloría, a la hora de evaluar el control interno fiscal de la Alcaldía se encontró que no fue lo suficientemente eficiente en 2016. Por ejemplo, hay un riesgo combinado alto y un riesgo de fraude también alto. Por ello lo calificó así: ‘Con deficiencias’.
Los $30 mil millones para salud que no se han invertido
Uno de los hallazgos más importantes de la Contraloría hace referencia a los $30 mil millones que se destinaron para el mejoramiento de centros de salud en Bucaramanga.
Este dinero no se ha podido invertir por el incumplimiento del contrato que se hizo para hacer los diseños (que se suscribió en 2015 en el gobierno de Luis Francisco Bohórquez). Al no haber diseños, no se pudieron contratar las obras y esta inversión en infraestructura se atrasó al menos tres años.
Por otro lado, el informe destaca que para el 31 de diciembre de 2016 no había deudas del Municipio con las EPS.
Consecuencias de descertificación
En el caso de los recursos para Agua Potable y Saneamiento Básico, se da el antecedente de que el Municipio fue descertificado por la Superintendencia de Servicios Públicos en septiembre de 2015, lo que tuvo efecto en la vigencia de 2016.
En ese sentido, los recursos del SGP se giraron a la Gobernación de Santander, quien los ejecutó en el pago de subsidios. Esto llevó a que no se hicieran inversiones en 2016 y se afectara la ejecución de proyectos.
Además, según la Contraloría, no se hizo un efectivo seguimiento para verificar que las empresas de servicios públicos sí destinan el dinero de los subsidios para las poblaciones más vulnerables. Al respecto, la Alcaldía respondió en el informe que hay un procedimiento preliminar que está a la espera de aprobación de los líderes de los procesos.