Bucaramanga
Multa por comprar en la calle enciende debate en Bucaramanga
Cuando compraba chontaduro a un vendedor ambulante en zona céntrica de Armenia, el pasado lunes una mujer fue multada con $833 mil, en cumplimiento del Código de Policía. Este caso, que ha suscitado polémica en el país, encendió el debate en la capital santandereana, en donde 56 de cada 100 trabajadores laboran en condiciones de informalidad (según cifras del Dane).
Mientras las autoridades locales ven esta sanción como una medida eficaz para contrarrestar el comercio informal y promover la cultura de la legalidad en la población, la ciudadanía estima que dicha imposición es un abuso de poder y una forma de “sacarle el dinero al pueblo”.
“Hay que cumplirlo”
Por parte del Municipio, se considera que el nuevo Código de Policía brinda los recursos necesarios para garantizar legalidad en el comercio y que el espacio público permanezca despejado.
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“Este tipo de comparendos los aplica la Policía, pues según el Código, ellos son los encargados de efectuar la recuperación del espacio público. Esta normativa es una herramienta para controlar las ventas ambulantes y para que la gente adquiera la cultura de hacer compras en establecimientos legales y no en las calles; además contribuye al despeje de aceras y vías”, indicó Alba Navarro Fernández, Secretaria del Interior.
Es importante señalar que en el caso de Armenia, la Administración Municipal advirtió previamente a la ciudadanía sobre la imposición de multas a personas que hicieran compras en la vía pública.
“Si así lo contempla el Código, pues hay que cumplirlo porque la norma está escrita; hay que interpretarla y aplicarla. Por ahora la Alcaldía no ha dado ninguna orden al respecto; si se registran sanciones o ‘comparendos’ es por aplicación de la normativa por parte de la Policía”, aclaró Navarro Fernández.
Acá se podría aplicar
El ‘comparendo’ impuesto a la mujer que compró el chontaduro, fue por la aplicación del Artículo 140, numeral 6 del Código de Policía, el cual establece una sanción por: “Promover o facilitar el uso u ocupación del espacio público en violación de las normas y jurisprudencia constitucional vigente”.
Según fuentes oficiales de la Policía Nacional, esta norma permite que en Bucaramanga y su área también se pueda multar a los compradores de ventas callejeras.
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“Se puede interpretar como promotor de la ocupación del espacio público a aquella persona que sea sorprendida haciendo compras en las calles, pues el comprador está promoviendo la actividad de los vendedores ambulantes y la invasión que estos hacen de las zonas públicas”, explicó el miembro de la Ponal.
Conforme a lo expresado por la fuente consultada, antes de que se aplique dicho numeral del Código de Policía en la ciudad, tal norma debe ser socializada con determinada antelación a la ciudadanía: “en Bucaramanga también se podría emular este control al espacio público, o sea, que a quien compre en la calle se le dé el carácter de promotor de la ocupación de zonas públicas. Si las autoridades locales le informan a la comunidad que se va aplicar este numeral, se podría llegar al mismo escenario de Armenia”.
Es preciso indicar que hasta la fecha no se ha impuesto ninguna sanción a compradores de ventas ambulantes en la capital santandereana y su área.
Según las cifras oficiales de ‘comparendos’ impuestos por las autoridades, hasta el momento no se ha aplicado el numeral 6 del Artículo 140, del Código de Policía.
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Ciudadanía rechaza la imposición de costosas multas por ventas ambulantes:
Émerson Tirado,
transeúnte
“Es una multa muy cara e ilógica porque no se le hace daño a nadie. El Código debe revisarse y modificarse, incluso, todavía falta mucha socialización con la ciudadanía”.
Eliécer Angarita,
vendedor
“No debería existir multa para el comprador ni el vendedor. Fuera que se vendiera trago, pero uno vende comida. Esta es la forma de sustento de muchos y la gente consigue más barato en la calle”.
Luis Rico,
transeúnte
“Es injusto este tipo de multas, tanto para uno como comprador como para los mismos vendedores. Hay asuntos más importantes, esta es otra forma de sacarle el dinero al pueblo”.
Ómar Barrera, vendedor
“Esto es un abuso, cómo van a hacer una multa así de cara si la persona elige dónde comprar. Es un atropello, alguien que se gane el mínimo no alcanza a pagar una sanción como esta”.