Comunidad pide concertación de obras en nueva concesión a Barrancabermeja
A menos de un mes de iniciar el proceso de licitación para la concesión de cuarta generación Bucaramanga-Barrancabermeja-Yondó, la comunidad reclamó ayer, durante la audiencia de socialización del proyecto, que se definan y se concerten con los habitantes las obras adicionales que contempla el proyecto, tales como retornos y puentes peatonales que se deberán construir en los 157 kilómetros que se intervendrán en la obra.
El alcalde de Lebrija, Javier Uribe Motta, aseguró que se impacatarán más de 40 veredas que tiene el municipio, incluyendo más de cinco escuelas a lo largo del trayecto. Según el mandatario, es indispensable brindar todas las garantías de seguridad a niños y jóvenes que transitan permanentemente por la vía, que contempla una velocidad de diseño de 80 kilómetros por hora.
“Los compromisos hay que hacerlos desde antes porque por ejemplo la concesión ZMB se llevó parte de la escuela de San Pablo y nunca la restituyeron”, dijo Uribe Motta.
Las inquietudes en cuanto a la movilidad también se amparan en las cifras de visitantes que se calculan para el embalse de Hidrosogamoso, que se estiman entre 10 mil y 15 mil turistas que recorrerán la zona durante los fines de semana.
Nuevos peajes
La población también se mostró inquieta por la instalación de dos nuevos peajes. Uno de ellos estará a la salida de Lebrija en sentido Bucaramanga-Barrancabermeja, y el otro sobre La Lizama mientras que la caseta del puente Sogamoso se trasladará.
“Habrá una reducción de los costos de operación y una disminución en tiempo de casi 45 minutos por lo que indudablemente habrá que pagar por estos beneficios, además de otros que tendrán los conductores y usuarios de la vía. La idea es que si uno va de Lebrija a La Paz pague en este primer peaje porque los que bajan hacia Bucaramanga pagan en ZMB. Después construiremos la variante de La Paz, allí quedará un peaje con un valor adicional que lo pagará la carga pesada. Y si uno va de Lebrija hacia Barranca habrá otro peaje cuando se pase de La Fortuna hacia La Lizama para llegar a Barrancabermeja”, explicó la gerente de Proyectos de la ANI, Silvia Urbina.
La funcionaria añadió que los vehículos que vienen de la Ruta del Sol II pagarán un peaje que se denominará Rancho Camacho. Estos cobros, advirtió, se harán una vez se terminen las obras de la concesión.
Voceros de la ANI agregaron que hay una bolsa especial de recursos que contemplan la construcción de 10 puentes peatonales en todo el corredor. Además habrá retornos cada tres kilómetros. Se espera que el proyecto se adjudique en el primer trimestre del próximo año, y su periodo de preconstruccción tardará un año adicional por lo que las obras comenzarían en los primeros meses de 2016, para prolongarse por cinco años generando cerca de 5.000 empleos al año.