“Somos exportadores de excedentes”: Lacouture
La relación comercial entre Santander y los EE.UU. ha evolucionado considerablemente; sin embargo, aún falta por afianzar la cultura exportadora.
A pesar de que el departamento exportó al mercado americano en el primer semestre del año cerca de US$116,8 millones (disminuyeron 28,7%) e importó US$100 millones (representaron el 27,7% de las compras), Estados Unidos se consolida como nuestro principal socio comercial.
Para María Claudia Lacouture, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio Colombo Americana, AmCham Colombia, “no somos exportadores de productos con una estrategia definida, sino colocadores de excedentes”.
Asegura que desde la entidad han capacitado a sus afiliados en los procesos para llegar al mercado externo y cómo conseguir desarrollarlos, desde la experiencia de empresarios exportadores.
“Vemos medianas empresas que empiezan a conquistar el exterior, pero con una cultura exportadora limitada, en el sentido de que no estamos sintonizados con esos retos y obstáculos, factores que llevan a que el producto no sea el adecuado para vender, porque no están dentro de la estrategia, procesos de desarrollo y adecuación del mismo”, anotó.
En días pasados, Lacouture estuvo en la ciudad reunida con empresarios del departamento, trazando estrategias para consolidar las exportaciones santandereanas a Estados Unidos.
En su visita, dialogó con Vanguardia Liberal y la directiva disertó sobre cómo impulsar más las ventas en el exterior y las potencialidades que tienen varios sectores de Santander.
¿Cuáles son los sectores con gran potencial en este mercado que no han dado el paso, pero que se pueden fortalecer?
Hay todavía mucho campo por desarrollar en el sector de textiles y confecciones, ya que se tienen nichos de mercado. En el tema agrícola estamos comenzando, pero es un sector con grandes oportunidades desde Santander y donde se puede trabajar de la mano con la Cámara Colombo Americana para conocer las oportunidades y generarlas a este destino.
¿Cómo seguir afianzando esas oportunidades?
Lo primero es indagando sobre cómo desarrollamos productos que estén acorde a Estados Unidos. Otro tema para fortalecer son las buenas prácticas, saber cuáles procesos se deben hacer y cuáles no. También es importante la participación en relacionamientos comerciales y otras herramientas de mercadeo necesarias para fortalecer esa relación.
¿Por qué son pocos los empresarios que se arriesgan a realizar ventas en el exterior?
Es un reto muy grande; sin embargo, ese temor se está superando y vemos empresas medianas que empiezan a exportar. Aún así, hay una cultura exportadora limitada. Un reto son los altos costos del transporte que obligan de una u otra forma al colombiano a quedarse donde está y vender en el espacio que sea de fácil acceso; aunque con el proceso de infraestructura que se tiene en el país, se empieza a romper ese mito.
¿Qué se está haciendo desde AmCham Colombia?
Estamos trabajando en un proyecto de emprendimiento con la Embajada para que los empresarios puedan vender no solo a nivel nacional sino en Estados Unidos. Ese tipo de proyectos se seguirán fomentando para que más emprendedores se vinculen y así crear una cultura de negocio que incluya la exportación.
En el primer semestre del año, las exportaciones crecieron 15,9% y las importaciones, un 7%, de acuerdo con el Dane. ¿Cómo lograr un equilibrio en esa balanza?
La balanza comercial es una variable importante para la economía nacional y definitivamente hay que buscar un equilibrio en la importación y la exportación. La forma de hacerlo es a través de un proceso productivo que busca generar mayor productividad para las empresas, pero al mismo tiempo hay que reconocer que las importaciones son indispensables para ese proceso productivo. El 70% de las importaciones colombianas son de productos que no se consiguen en el país, entonces es una proveeduría competitiva.
¿En Santander, cómo subir en el ranking nacional en exportaciones, donde siempre se llega al puesto 17 o 16?
Implementando un proceso productivo, con innovación, tecnología y acciones para ayudar a los empresarios. Lo importante de este contexto internacional, donde existe un proceso de encadenamiento productivo a nivel mundial que no se acabará fácilmente por el contexto de guerra comercial que se pueda avecinar en el mundo, es indispensable que las empresas de Santander se involucren en las cadenas productivas, a través de generar valor y productos que sean competitivos.
Los empresarios consideran que se debe trabajar en la estabilidad jurídica, el impulso a sectores promisorios y la cooperación tecnológica, para potenciar el aprovechamiento del acuerdo. ¿Qué se está haciendo desde la Cámara Colombo Americana?
Esto ha sido parte de las acciones indispensables que se han propuesto al nuevo gobierno. Hay diversas variables, uno es la estabilidad jurídica dentro de los sectores productivos que se ha mantenido en los últimos años. No es una razón per se, es una estabilidad más en los temas tributarios, consultas previas, legales y regionales, relacionados con un sector de minería y extracción de productos mineros. En productividad, definitivamente para crecer y subir en el escalafón de competitividad, las regiones tienen que contar una política de desarrollo productivo donde se trabaje los accesos a tecnología y la capacitación del recurso humano idóneo, que es uno de los problemas más grandes que tiene el país y es importante para poder surgir en el escalafón de la competitividad que brinda limitantes.
¿Es oportuno un acuerdo para evitar la doble tributación?
Ojalá que el Gobierno nacional continúe con el proceso que se venía adelantando para lograrlo, es un beneficio para los dos países, que genera mayor número de empleos. En el momento que se logre este tipo de acuerdos con EE.UU., la inversión extranjera tendrá una variable importante para mirar a Colombia. Aunque ya hay una inversión constante del más del 16% desde 2012, siempre se puede mejorar.