El exilio, un impulso en medio de la dificultad
Raoul Peck, director de ‘El joven Karl Marx’, presenta un filme que ahonda en esa visión humana del afamado y respetado intelectual europeo, autor, junto con Engels, del ‘Manifiesto del Partido Comunista’. Peck, acostumbrado a crear incendiarios ambientes, ofrece un largometraje que logra mostrar el origen de una revolución que poco a poco se va gestando en la sociedad y que “El joven que quiso cambiar el mundo” va liderando con otras luminarias en un camino que no es nada fácil, pues él es víctima del exilio.
Pese a que la vida de Marx pareciera un mar de contrariedades en contra de su sueño de libertad, porque su esposa Jenny y su gran amigo, Friedrich Engels, hacen parte, sin quererlo, del mundo que Karl critica, logra darle forma a un pensamiento que revolucionará la sociedad de su tiempo y dará surgimiento a la Liga de los Comunistas.
La película ofrece desde el inicio un mundo donde la diversidad no tiene barreras, pues, además de presentarse en tres idiomas diferentes (inglés, francés y alemán), debido a que es una coproducción que cuenta con el apoyo de Bélgica, Francia y Alemania, también permite que el espectador vislumbre un mundo infinito de posibilidades para una mente inquieta como la del joven Karl Marx, quien, en medio de la represión de la primera mitad del siglo XIX, mantiene firmes sus ideales, aun en las dificultades económicas de su familia. Cada pequeña dificultad en su vida se convierte en un aliciente para mostrar esa faceta, no solamente de pensador, sino de luchador que habita en su ser.
En ese rompecabezas llamado Vida, aparece su gran bastión, Engels, con quien cambiarán la perspectiva que se tenía sobre el mundo obrero, con base en una serie de ideas económicas que redundarán en el sistema social de esa época de conflictos de toda índole. Marx, considerado “el mayor pensador materialista de nuestros tiempos”, es el gestor de una revolución que forja sus bases en todos los sectores olvidados y marginados por la sociedad. Con ellos, y por ellos, crea un sistema desde el ámbito filosófico, histórico, político, económico y sociológico cuyas ideas aún perduran y tienen validez en medio de esta sociedad de tintes capitalistas.
Karl Marx no fue solamente un hombre de ideas. En el filme se percibe su entusiasmo y su participación en la sociedad que tanto analiza. Es un hombre de acción, consecuente con su particular visión de la humanidad, que le permitirá ser un ciudadano del mundo, un genio valorado en los círculos de intelectuales y apoyado por todos en pro de su lucha social e ideológica.