BOGOTÁ
Ángel de Victoria’s Secret brilló en pasarela paisa
Su belleza deslumbra en la pantalla y en la vida real, su sonrisa es la misma que capturan las cámaras cuando desfila en la pasarela y su “hola” con acento portugués puede hacerlo ascender al cielo.
Disculpándose por su, según ella, terrible español, pone todo su esfuerzo en contar lo alegre y emocionada que se siente al pisar tierras colombianas por primera vez: “¡Me siento tan feliz! Todos son tan queridos conmigo y tan buenos que me siento especial”. ¿Y es que no lo es?
Siendo muy niña en Brasil, soñaba con ser una de las modelos más importantes del mundo y quería desfilar en las pasarelas más deslumbrantes del planeta, y como ella misma lo dice, “hacer parte del grupo Victoria´s Secret es un triunfo, es como decir ¡gané!”.
Barbara llega allí porque, después de escalar en el modelaje durante 12 años, la marca la llamó para hacer una prueba con todos sus looks y así fue como entró al grupo de las modelos más cotizadas del planeta, “donde no hay rivalidades, porque todas ya ganamos, triunfamos, llegamos al top, al nivel más alto, y lo que hacemos es disfrutar el momento”.
Y eso es precisamente lo que ella les aconseja a las chicas que entran nuevas a este campo, tener paciencia y disfrutar lo que la vida les brinda. “Si eres de las que te destruyes con una crítica, este no es tu espacio, busca otra cosa, porque aquí hay que caer, levantarse y seguir, esta es una profesión muy complicada”.
La música como relevo
Barbara sabe que alrededor de los 35 años ya pasará su tiempo de desfilar y por eso tiene claro que la música la acompañará por siempre, por ello tiene proyectos a futuro en este campo.
Barbara percibe a la mujer colombiana como fuerte, femenina, que le gusta cuidarse y llevar una vida saludable, y eso es lo que quiso ver durante los pocos minutos que estuvo en Colombiamoda.
Hoy se va de la ciudad, pero tiene la convicción de que volverá y no solo a modelar, vendrá para probar algunas recomendaciones gastronómicas como los jugos de frutas, las arepas y la bandeja paisa (que no sabemos si ya la comió después del desfile, porque prometió hacerlo).