Pekín pide a Dalai Lama que cree una "buena atmósfera" para proseguir diálogo
"El Dalai Lama debe tomar acciones concretas para responder las peticiones de China", destacó el portavoz del Ministerio de Exteriores chino Qin Gang en una rueda de prensa.
Qin no confirmó una fecha para la que sería la octava ronda de conversaciones, al señalar que los departamentos gubernamentales encargados de organizar estos encuentros "ofrecerán la información relevante".
El Gobierno chino y emisarios del Dalai Lama se han reunido en dos ocasiones desde los violentos sucesos de marzo de este año, cuando una revuelta de la población tibetana en Lhasa, la capital regional, produjo 19 muertos, según las autoridades chinas.
Grupos independentistas tibetanos en el exilio aseguraron que la represión china de esas revueltas produjo más de 200 muertos.
El Dalai Lama, exiliado en Dharamsala (India) desde 1959, tiene previsto enviar a la octava ronda a sus enviados especiales Lodi Gyaltsen Gyari y Kelsang Gyaltsen, que ya han participado en los siete anteriores procesos de diálogo.
Uno de los principales desacuerdos entre ambas partes se encuentra en la extensión de la región tibetana.
Para China ese territorio se limita a la región autónoma establecida actualmente (unos 2 millones de kilómetros), mientras que para los tibetanos en el exilio el "Gran Tíbet" ocuparía una extensión que casi doblaría esa cifra e incluiría la provincia de Qinghai, donde nació el Dalai Lama y lugar de nacimiento de los ríos Amarillo, Yangtsé y Mekong.
