"Estos comentarios del presidente de Estados Unidos son sorprendentes y vergonzosos. Lo siento, pero no pueden ser definidos de otra manera que como racistas", afirmó en una rueda de prensa el portavoz de la Oficina, Rupert Colville.
"No se puede rechazar un país entero o un continente como 'agujeros de mierda', cuyas poblaciones enteras, que no son blancas, no serán bienvenidas", agregó.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, criticó ayer la llegada de inmigrantes de algunos países como El Salvador y Haití, y los consideró "agujeros de mierda".
Lea también: Trump calificó como "agujeros de mierda" a El Salvador y Haití
Según publicaron medios estadounidenses, en concreto, Trump dijo: "¿Por qué tenemos a toda esta gente de países (que son un) agujero de mierda viniendo aquí?".
El mandatario sugirió entonces que Estados Unidos debería traer a más inmigrantes de países como Noruega, con cuya primera ministra se reunió este miércoles, de acuerdo con el The Washington Post.
"El comentario positivo sobre Noruega subraya el sentimiento (racista) muy claramente", puntualizó el portavoz del Alto Comisionado.
Según Colville, estos comentarios de Trump no son aislados y se enmarcan en un posicionamiento claramente xenófobo del presidente estadounidense.
"Como los anteriores comentarios sobre los mexicanos o los musulmanes, las propuestas políticas contra grupos enteros en base a la nacionalidad, la religión, y su rechazo a condenar claramente las acciones antisemitas y racistas de los supremacistas blancos en Charlottesville, todo esto va contra los valoresuniversales que el mundo tanto ha luchado por establecer desde la Segunda Guerra Mundial".
The language used by me at the DACA meeting was tough, but this was not the language used. What was really tough was the outlandish proposal made - a big setback for DACA!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 12, 2018
El portavoz continuó explicando que los comentarios de Trump no se refieren a un tema de falta de respeto y de mal gusto sino "de abrir la puerta a la peor parte de la humanidad".
"Se trata de aceptar y apoyar el racismo y la xenofobia que potencialmente destruirán la vida de muchas personas. Esta es la consecuencia más peligrosa de este tipo de lenguaje usado por una importante figura política".
En el mismo contexto, Colville recordó que el máximo responsable de Derechos Humanos de la ONU, Zeid Ra'ad Al Hussein, ha pedido al Congreso de Estados Unidos que ofrezca una solución legal duradera a los llamados "Dreamers", inmigrantes que llegaron a Estados Unidos de forma irregular cuando eran niños y que no cuentan con documentos en regla.
Lea también: Los palestinos no se reunirán con ningún representante de EE.UU. para proceso de paz
"El futuro de los 'Dreamers' no debería usarse como moneda de cambio para negociar una severa y restrictiva ley migratoria y de seguridad. Son personas, no mercancías", subrayó.
Según los medios, Trump hizo los comentarios denigrantes cuando dos senadores le plantearon un proyecto de ley migratorio que otorgaría visados a algunos de los ciudadanos de países que han sido retirados recientemente del programa de Estatus de Protección Temporal (TPS), como El Salvador, Haití, Nicaragua y Sudán.
...Y tú? Qué vas a hacer hoy para demostrarle a Trump que nuestro país no es un #shithole ?
— Eduardo Roshardt (@eduroshardt) January 12, 2018
Cómo vamos a permitir eso? Cómo le vamos a permitir que diga que los africanos son una mierda. Que los buenos son los noruegos? Quizás si busca bien, Trump lleva el negro detrás de las orejas.
— roberto cavada (@rcavada) January 12, 2018
“Los comentarios del presidente Trump son chocantes, vergonzosos y “racistas”, no hay otra palabra que lo describa”: portavoz de la oficina de DDHH de la ONU. ⬇️ https://t.co/EIaP8vxj44
— Naciones Unidas (@ONU_es) January 12, 2018
Colville también se refirió a este aspecto y dijo que la Oficina del Alto Comisionado está muy preocupada por la decisión de acabar con los programas de TPS para los salvadoreños, los haitianos y los nicaragüenses.
Especificó que estas decisiones afectarán a 180.000 salvadoreños, 59.000 haitianos y 5.300 nicaragüenses.