Inteligencia artificial para enfermedades oculares: diagnósticos en un parpadeo
A partir de estos datos, busca las señales indicadoras de enfermedades crónicas y condiciones como diabetes, hipertensión, arteriosclerosis, enfermedad del nervio óptico, miopía alta, degeneración macular relacionada con la edad, y muchas más.
Sin dolor, con un costo bajo, y automatizada, tiene una tasa de precisión muy alta para encontrar señales de enfermedades en las imágenes retinales que los diagnósticos convencionales, y más lentos, realizados por los doctores. Como tal, tiene el potencial de hacer más disponible para millones de personas, no solo en China sino en todo el mundo, la atención médica preventiva.
“Utilizamos un algoritmo en la nube para salvar las vidas de las personas que no saben que tienen serios problemas médicos”, comentó Ray Zhang, quien fundó Airdoc hace cuatro años.
Por un largo tiempo, los doctores han examinado la retina no solo para evaluar el ojo, también para encontrar signos para el resto del cuerpo. Al saber esto, Ray armó un equipo de ingenieros de TI (Tecnología de la Información) con su misma forma de pensar quienes acumularon datos de pixeles de miles de escaneos retinales y crearon un algoritmo.
Con el poder de las capacidades de aprendizaje automático de Microsoft Azure, establecieron enseñarle al algoritmo cómo buscar pequeños signos de enfermedades como manchas, puntos, decoloración, vasos sanguíneos con alguna deformidad, y otras anormalidades.
“Encontramos que Microsoft tiene la infraestructura de nube más avanzada para realizar esto”, comentó Zhang, quien dijo que “hemos trabajado muy de cerca con el equipo de aprendizaje automático de Microsoft. Entrenar modelos de aprendizaje profundo en Azure es muy sencillo”.
Los datos de los pacientes también se mantienen seguros y confidenciales con Azure, algo que es “de misión crítica para el nivel de servicio que brindamos a nuestros clientes”, anotó. En su oficina en los suburbios de Beijing, Zhang demostró con orgullo la parte física del sistema Airdoc, un pequeño dispositivo de escritorio que se asemeja a un escáner de optometría convencional.
El paciente se sienta en un banco, se inclina hacia adelante, coloca su barbilla en un soporte y mira hacia la oscuridad de una pieza ocular. Entonces el algoritmo entra en acción, ajusta con precisión el ángulo de la cabeza hasta que una cruz verde entra en el foco de la mirada del ojo derecho. Un momento después, aparece un destello brillante, aunque no incómodo, de luz blanca. El proceso entonces se repite para el ojo izquierdo.
La máquina toma imágenes médicas de alta resolución de las dos retinas. De manera instantánea las envía a la nube donde toma entre 20 y 30 milisegundos (alrededor del mismo tiempo de un parpadeo) para analizar ambas retinas.
Momentos después un tablero de diagnóstico con un alto nivel de detalle es enviado a un smartphone o tableta. Califica de alta a media la susceptibilidad del paciente a una larga lista de enfermedades. Si hay algún problema, les recomienda buscar ayuda médica especializada.
En la actualidad, puede buscar 30 enfermedades. La evolución del aprendizaje automático aumentará pronto esa cantidad a 50, y de manera eventual, podría llegar a las 200.
Zhang considera su sistema como algo que cambiará las reglas del juego debido a su potencial de entregar a escala y aligerar los estrechos recursos médicos.
A la fecha, ha escaneado a más de 1.21 millones de personas, la mayor parte de estas en China, pero también en los Estados Unidos, India, y partes de África. “Los usuarios de Airdoc están en todo el mundo. esperamos que nuestra tecnología de aprendizaje profundo pueda prevenir todo tipo de enfermedades”, indicó.