Elecciones y justicia
En dos semanas estaremos frente a la responsabilidad de escoger a los congresistas que nos representarán y seleccionar a dos de los candidatos presidenciales de los partidos de la extrema política y considero que sería inaceptable e irresponsable permanecer indiferentes en estos momentos de decisión para el futuro del país. Los colombianos durante generaciones estuvimos alineados en dos partidos tradicionales, y era muy sencillo votar, periódica y disciplinadamente porlos candidatos del partido al que se pertenecía, muchas veces por herencia familiar o región.
El panorama hoy es totalmente diferente, el domingo 11 de marzo tendremos un tarjetón con 16 partidos políticos y siete comunidades indígenas y varios de ellos han acordado coaliciones que, para el ciudadano común que poco interés muestra en el análisis político, resulta bastante complejo de entender.
Como si lo anterior no fuese de por sí confuso, hay procesos jurídicos de todos los niveles, desde graves crímenes y robos enormes, hasta la irresponsable inasistencia alimentaria, que involucran a cientos de candidatos o a sus familiares inmediatos. El Ministro de Gobierno ha indicado que 103 candidatos al Senado tienen antecedentes policiales, 45 investigados por la Procuraduría, tres por la Contraloría y 631 por la Corte Suprema de Justicia. Una verdadera vergüenza.
Las recientes decisiones jurídicas que han tocado a cientos de candidatos, se nos hace difícil de entender y prever cómo reaccionarán los electores, si con el lógico rechazo de no votar porlos judicializados delincuentes o con herencias y vinculaciones con estos, o si por el contrario, esto aumentará su aprecio y votos por una equivocada solidaridad.
Fundamental el respeto por la decisión del voto de cada uno, así no la compartamos, pero hay principios generales como buscar una amplia representación regional, votando por santandereanos y la no reelegir a ninguno de los actuales congresistas, por cuanto el cambio no se hace con los mismos y la situación del país requiere cambios profundos.