Test sobre la ingenuidad
Busca tratar de medir la inocencia asaltada en tiempos electorales; las preguntas siguientes, tomadas como base de la red, indagan acerca de qué tipo de ingenuo es Usted y llegan en el momento preciso, cuando toda clase de falsas verdades se divulgan para ganar adeptos, de mala fe sobre personas y movimientos, cazando incautos desinformados, que son aquellos con mínima formación política o sea la gran mayoría del censo electoral colombiano; y otros minoría pero informados, que prefieren la ignorancia voluntaria por aquello de la firmeza de principios. A unos y otros no les sobra preguntarse si:
¿Soy de los que creen que en Colombia hay ya voto electrónico, que las Farc se van a tomar el país, que a los guerrilleros el Gobierno les paga $1,8 millones mensuales y que además creen en el “Castrochavismo”? ¿De los que creen que la paz se logra a punta de plomo, que el papa Francisco como el presidente Santos son “comunistas”, que van a cedular a los venezolanos inmigrados para que voten en las próximas elecciones, que existe una “ideología” de género, que los maricas van a acabar con la familia y que el senador Uribe es un verraco don Juan empedernido?
¿Si soy de los que afirman que llegó una “comisión” cubana y unos sabios cibernéticos de Rusia para robarse las elecciones, de los que creen que un pueblo que elige corruptos es víctima y no cómplice; de los que creen que Fajardo y De la Calle son un “peligro” para el país…. Y finalmente de los que repiten cualquier cadena de “whatsaap” sin consultar si es verdad o mentira lo que les envían?
Si más del 90% de las respuestas son afirmativas, usted no tiene remedio: es un ingenuo crónico y su futuro es la resignación; si alcanza entre el 50% y el 90% hay esperanzas, pero debe someterse a un tratamiento intenso que lo haga despertar de su inocencia política y si alcanzó un porcentaje menor al 50% padece de desmayos más o menos frecuentes que puede curarlos leyendo más diferentes fuentes, masticando bien la comida para no tragar entero y escogiendo amigos menos sectarios e intensos y sí más librepensadores.