Como héroe despidieron al soldado socorrano
En la capilla del Batallón Galán se cumplieron las exequias del soldado Néstor Javier Uribe, muerto en combate en Norte de Santander.
Familiares, amigos y miembros del Ejército Nacional le dieron el adiós al soldado socorrano Néstor Javier Uribe Rivero, quien falleció en el ataque perpetuado por la guerrilla del Eln, en jurisdicción de Chitagá en Norte de Santander.
A las tres de la tarde en la capilla del Batallón de Artillería Número 5 Capitán José Antonio Galán, se celebró la misa con la que además de darle el último adiós a Néstor, las fuerzas militares le rindieron un sentido y merecido homenaje al joven soldado de tan sólo 20 años de edad.
“El era muy consentido en la casa, un buen muchacho, excelente ser humano, lo único que quería era ayudarnos porque nosotros somos muy pobres”, expresó entre sollozos Pablo Uribe, padre del uniformado.
Según expresó el padre del soldado, éste se habría comunicado con la familia por última vez la semana pasada, “él hablaba mucho con la mamá, le contaba cómo les estaba yendo y sólo esperaba salir rápido del batallón para ayudarnos porque somos campesinos”.
El soldado Néstor Javier cumplía hoy su año de servicio militar obligatorio; sin embargo ayer fue sepultado en su pueblo natal el Socorro, la tierra que lo vio nacer y que además un día lo vio jurar que moriría por la patria de ser necesario. Juramento que cumplió a cabalidad. Luego de la ceremonia religiosa, los restos mortales del soldado fueron trasladados al cementerio local, donde se rindieron honores póstumos al militar caído en combate.
También se escuchó la nostálgica trompeta interpretando el toque del silencio, que será el eterno compañero del joven soldado que entregó su vida por defender lo que más amaba…su patria y su familia.