Del total de habitantes de calle identificados en los censos hechos por la Administración Municipal aproximadamente 251 son realmente santandereanos 119 de ellos de Bucaramanga los demás provienen de otras partes del país
Pese a las estrategias que según la Administración Municipal se vienen adelantando, los habitantes de calle siguen estando presente en andenes, semáforos y puentes de la capital santandereana.
Es más, parece que las acciones tomadas hasta el momento tan solo han trasladado el problema.
Por lo menos así fue denunciado por comercientes y líderes cívicos de la comuna 4, meses después de la anunciada recuperación del sector comprendido entre las carreras 19 y 14 y las calles 28 y 32, más conocido como la ‘zona 30’.
Y es que si bien allí se cumplió con la erradicación de las ollas de microtráfico y el ‘despeje’ de indigentes, los vecinos de esta zona aseguran que “no hubo una solución real a esta problemática, los sacaron de allá y ahora se están tomando las calles aledañas”.
Edinson Ojeda Angarita, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Girardot y edil de la comuna 4, manifestó que desde que comenzó la recuperación de la ‘zona 30’ en las calles 24 y 28 con carrera 14 se incrementó la presencia de habitantes de la calle.
“Estamos preocupados porque la cantidad de indigentes es mucha. Lo que hemos observado es que con la recuperación de la 30 se corrieron esos habitantes de calle para los sectores vecinos”, afirmó.
De acuerdo con el edil, “por un tiempo estuvo calmado pero ahora estamos peor que hace muchos años... los comerciantes y padres de familia están inconformes, más aún porque en esta zona se encuentra la sede B del Politécnico”.
Estudiantes y padres de familia de barrios como Girardot, La Feria, Pio XII, Nariño y 12 de Octubre están obligados a transitar diariamente por estas calles
Inseguridad
Comerciantes que se encuentran en las calles cercanas a la denominada ‘zona 30’ denuncian que durante los últimos meses la inseguridad se ha incrementado.
Según un comerciante que solitó reserva de su identidad, “cada día es peor, la inseguridad aumenta, al igual que las peleas y se han bajado las ventas por la inseguridad”.
“Desde hace dos meses, tras la recuperación de la 30, los indigentes comenzaron a invadir estas calles. La situación ha afectado en gran manera al comercio, pues desde la mañana hasta las 6:30 p.m., cuando uno cierra, las calles viven llenas de indigentes”, señaló.
Tres nuevos Hogares de paso
Actualmente, de acuerdo con Martha Eugenia Jiménez Fonseca, alta consejera para la Política Social de la Alcaldía de Bucaramanga, la ciudad cuenta con un hogar de paso para habitantes de calle, ubicado en el barrio Alarcón.
La institución funciona desde hace cerca de ocho meses y atiende un promedio de 80 personas diarias.
“En el hogar de paso desayunan, almuerzan, se bañan y algunos pasan ahí la noche, pero otros siguen de paso pues no se les puede obligar a quedarse. Asimismo tenemos a muchos que no utilizan el servicio a pesar de que se les ha ofrecido en repetidas ocasiones”, afirmó.
La funcionaria aseguró que como parte de un programa de habitante de calle, el próximo año se podrían en funcionamiento otros tres hogares de paso como ese en la ciudad, “lo que permitiría tener mayor cobertura y atender en diferentes sectores del municipio”.
La alta consejera para la Política Social señaló que además de los servicios básicos en estos hogares de paso, las personas que lo manifiesten voluntariamente son trasladadas a programas de rehabilitación en centros especializados.
¿Hay una solución definitiva?
“Mientras persista el microtráfico de sustancias psicoactivas, se mantendrá el problema de indigencia en las calles de la ciudad”, sostuvo la alta consejera para la Política Socia, Martha Eugenia Jiménez Fonseca.
De acuerdo con la funcionaria, “erradicar esta problemática totalmente nunca lo vamos a lograr, mientras no haya una cooperación de la Policía con las ‘ollas’... mientras sigan existien las ventas de psicoactivos seguirá la presencia de los habitantes de calle... un alcalde nunca terminaría con este proceso, se ayuda combatirlo pero es difícil ponerle fin definitivo”.
Con respecto a la recuperación de la ‘zona 30’ y el traslado de los indigentes a las calles aledañas, Jiménez Fonseca manifestó que es inevitable que suceda: “donde se limpie y se pone luz, el habitante de calle se va y se ubica en nuevos lugares... la población que quiere va al hogar de paso pero en la noche se queda en la calle. Ahí ya le corresponde un poco a la Policía y a la familia”.
La alta consejera enfatizó en que “este no es un problema solo de Bucaramanga, es una situación que se presenta de manera generalizada en todo el país”.