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Bucaramanga
Sábado 23 de noviembre de 2019 - 12:00 PM

Bucaramanga del Ayer: Hoy, Ciudad Bolívar

El tiempo es como un río formado por hechos e impulsado por una corriente de recuerdos. Vanguardia, a través de las fotos del ayer, recorre esos torrentes de historias que fluyeron en la otrora capital santandereana.

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Archivo / VANGUARDIA
Archivo / VANGUARDIA

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El proyecto de desarrollo urbano que comenzó a levantarse a finales de los años 70 y a comienzos de los 80 en los terrenos del otrora aeropuerto ‘Gómez Niño’, el mismo que hoy se conoce como Real de Minas, tuvo un primer eslabón: Hablamos de Ciudad Bolívar.

En ese entonces era el más ambicioso proyecto urbano que se hubiese concebido en nuestro país. Estuvo bajo la gerencia de Jorge Reyes Puyana y cristalizó el viejo anhelo de darles viviendas a miles de familias de estrato medio en Bucaramanga.

No obstante, la historia cuenta que esta iniciativa urbanística se empezó a construirse de abajo para arriba y Ciudad Bolívar la prueba fehaciente.

De hecho, la primera piedra de esa unidad residencial se adecuó justo en el remate de las laderas que bordeaban la antigua terminal aérea de Bucaramanga.

Las fotografías que hoy se publican en esta sección de la ‘Bucaramanga del Ayer’ dejan ver los inicios de las construcciones, tanto de las casas como las de los bloques de apartamentos.

“Éramos la cola de la cañada y prácticamente nos construyeron en las patas de la comuna número 7”, recuerda Doña Alcira Flórez, la primera vecina en ocupar la zona.

Ella, quien también se convirtió en la pionera de la dirigencia cívica con la presidencia de la Junta de Acción Comunal de Ciudad Bolívar de ese entonces, recuerda que a cada adjudicatario la casa le salía por cerca de $8 millones, a precios de esa época. Ese dinero se pagó en módicas cuotas.

El promotor urbanístico encargado de timonear de manera específica estas viviendas de Ciudad Bolívar fue un hombre de Molagavita, quien prácticamente fue el ‘padre adoptivo’ de la Real de Minas: Hernán Gómez.

Él, con el auspicio de la Empresa de Desarrollo Urbano, EDUB, bajo la gerencia de Reyes Puyana, logró ejecutar algo que parecía ‘quijotesco’ a comienzos de los años 80: Construir sobre las pistas de un viejo aeropuerto. Fueron 419 casas, las cuales se levantaron durante los años 81 y 82. Luego vinieron los bloques de apartamentos.

La inauguración se cumplió en 1983 y los primeros inquilinos en recibir las llaves de sus casas fueron Pedro Ortiz, Julio Cáceres y, por supuesto, Doña Alcira Flórez.

Ella misma recuerda que se sentía “como en la selva y alejada de la civilización: La única ruta de autobús que pasaba era la de carrera 21 y nos dejaba lejos”.

“Los inquilinos llegábamos a la urbanización por un ‘hilito de carretera’ que se acondicionó entre Ciudad Bolívar y San Gerardo. Después, todo cambió: se pavimentaron las vías, llegaron las otras urbanizaciones y el progreso se apoderó de la zona”.

Hasta aquí la memorable página del ayer de Ciudad Bolívar, la urbanización que quedó en la historia como el ‘pilar’ de Real de Minas, el proyecto que construyó una ciudad dentro de unas viejas pistas de aterrizaje.

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Publicado por Euclides Kilô Ardila

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