Tanto las instalaciones de la UIS como los sectores vecinos siguen siendo blanco de acciones vandálicas y han llevado la peor parte de las manifestaciones ocurridas durante los últimos meses.
El Consejo Académico de la Universidad Industrial de Santander, UIS, exhorta a las autoridades municipales, departamentales y policiales a implementar medidas que garanticen la integridad de la comunidad.
Incluso el organismo pide garantías para la preservación de los bienes institucionales, afectados por los problemas de seguridad registrados en inmediaciones al campus central de la Institución.
Los miembros de este importante Consejo también expresaron su rechazo a las acciones que personas desconocidas realizan durante las movilizaciones de la ciudadanía, las cuales alteran la tranquilidad con actos violentos e ingreso a la fuerza a las instalaciones de la UIS.
Para nadie es un secreto que este centro de educación superior sigue siendo el blanco de acciones vandálicas y han llevado la peor parte durante las últimas manifestaciones, ocurridas fuera y dentro de la institución.
La denuncia también está asociada a la ola de inseguridad que impera en la zona, hecho que se ha disparado durante las más recientes jornadas del paro nacional, las cuales han desencadenado en enfrentamientos entre los manifestantes y los miembros de la fuerza pública.
Las acciones vandálicas han causado afectaciones en la UIS. De acuerdo con el estimado oficial, los daños en el centro de educación superior dejan hasta el momento pérdidas representadas en más de $1.000 millones: “Al evidenciar los desmanes que vienen ocurriendo, urge combatir la delincuencia que se ha venido presentando alrededor y al interior de este centro universitario”, precisó el referido Consejo.
Y se reiteró el llamado que se ha hecho desde la Dirección de la UIS, en el sentido de asumir el compromiso de brindar espacios seguros para el tránsito y el acceso de personas en el barrio La Universidad, teniendo en cuenta el considerable número de instituciones educativas, centros deportivos y entidades prestadoras de servicios de salud que se ubican por allí.
“Ante el accionar de personas violentas y el despliegue de conductas al margen de la ley, la comunidad se siente inerme. La UIS se yergue como un territorio de paz y es por esto que no es compatible con que personas desconocidas utilicen el campus universitario para actividades ajenas a las misionales”, puntualizó el Consejo Académico.
