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Bucaramanga
Jueves 24 de enero de 2019 - 12:00 PM

Mal parqueo: multas aumentaron un 44% en Bucaramanga, pero falta más control

Según cifras de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, el año pasado se impusieron 21.181 comparendos por estacionar en sitios prohibidos. Comunidad y comerciantes consideran que este asunto se le salió de las manos a dicha autoridad.

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En múltiples espacios destinados exclusivamente para el peatón, en el barrio Diamante II, a diario se observan vehículos mal estacionados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)
En múltiples espacios destinados exclusivamente para el peatón, en el barrio Diamante II, a diario se observan vehículos mal estacionados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

En múltiples espacios destinados exclusivamente para el peatón, en el barrio Diamante II, a diario se observan vehículos mal estacionados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

Esta imagen se captó en las afueras del Hospital Universitario de Santander, en la carrera 33. Aunque en dicho punto existe una señal de prohibido parquear, debido al alto flujo de ambulancias que sale e ingresa a dicho centro médico, a diario se observan automotores particulares estacionados allí. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)
Esta imagen se captó en las afueras del Hospital Universitario de Santander, en la carrera 33. Aunque en dicho punto existe una señal de prohibido parquear, debido al alto flujo de ambulancias que sale e ingresa a dicho centro médico, a diario se observan automotores particulares estacionados allí. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

Esta imagen se captó en las afueras del Hospital Universitario de Santander, en la carrera 33. Aunque en dicho punto existe una señal de prohibido parquear, debido al alto flujo de ambulancias que sale e ingresa a dicho centro médico, a diario se observan automotores particulares estacionados allí. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

Pese a la operación de la Unidades de Bloqueo al Infractor (cepos), de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, sectores como Cabecera, Centro, San Francisco, San Alonso y Real de Minas, siguen sufriendo la invasión de automotores mal parqueados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)
Pese a la operación de la Unidades de Bloqueo al Infractor (cepos), de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, sectores como Cabecera, Centro, San Francisco, San Alonso y Real de Minas, siguen sufriendo la invasión de automotores mal parqueados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

Pese a la operación de la Unidades de Bloqueo al Infractor (cepos), de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, sectores como Cabecera, Centro, San Francisco, San Alonso y Real de Minas, siguen sufriendo la invasión de automotores mal parqueados. (Foto: Élver Rodríguez /VANGUARDIA LIBERAL)

Aunque la Dirección de Tránsito de Bucaramanga implementó la instalación de cepos para castigar y prevenir el parqueo indebido de automotores, con una inversión que superó los $200 millones, 16 meses después de iniciarse tal estrategia las calles, andenes y zonas para peatón siguen invadidas por un gran número de vehículos.

Basta con recorrer cualquier sector de la capital santandereana para darse cuenta de la considerable cantidad de conductores que deciden ocupar sin ninguna preocupación los senderos o espacios exclusivos del transeúnte, o de quienes dejan sus automotores abandonados en la vía y forman trancones.

Las cifras suministradas por la Dirección de Tránsito de Bucaramanga evidencian un aumento del 44% en la imposición de multas por estacionar en sitios prohibidos, comparando 2017 y 2018.

Tal información señala que en 2017 se impartieron 14.718 ‘comparendos’ a conductores que cometieron dicha infracción, mientras el año pasado esta cifra subió hasta las 21.181 sanciones. Es decir, el año anterior se impusieron 6.463 multas más.

“2.881 vehículos fueron inmovilizados por abandono en vía pública y zonas peatonales. Otros 18.300 conductores se sancionaron por ocupar el espacio público”, indicó la Dirección de Tránsito Local en dicho reporte.

“Muy pocos alféreces”

Veedores ciudadanos, como Pedro Antonio Torres, a diario son testigos del descaro e incultura de muchos conductores que parquean de forma indebida: “El problema persiste, sobre todo en el Centro. Por ejemplo, la carrera 16, entre calles 33 y 41, es una de las zonas más neurálgicas. Allí el caos es terrible”.

Para Torres, Tránsito de Bucaramanga debería gestionar la ampliación de su cuerpo de alféreces, con el fin de impartir mayor control y prevención. En la actualidad tal entidad dispone de 166 alféreces, que se dividen en tres turnos de trabajo por día (55 cada turno).

“El mal parqueo se le salió de las manos a Tránsito. Yo veo que hacen operativos, pero hay muy pocos alféreces para la gran cantidad de vehículos y de infractores que existen”, agregó este veedor.

“El problema sigue igual”

Iván Cárdenas, administrador de un parqueadero en el sector del Parque San Pío (Cabecera), afirma que tales cifras de la Dirección de Tránsito no se ven reflejadas en las calles.

“En Cabecera el problema está igual que siempre. Alrededor del parqueadero todos los días nos dejan carros botados, incluso hasta en la entrada. La carrera 33 permanece ‘inundada’ con motos parqueadas sobre los andenes, todos los días, y no se hace nada”, denunció Cárdenas.

El comerciante relató un hecho muy particular que presenció: “que días llegó una grúa de Tránsito y se detuvo frente al parqueadero. Pensé que el de la grúa iba a inmovilizar las motos que habían ahí, pero no fue así. El conductor de ese vehículo oficial dejó el automotor mal estacionado mientras hacía una diligencia personal”.

Vanguardia Liberal trató de obtener una declaración de Germán Torres Prieto, director de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, pero hasta el cierre de esta edición el funcionario no había emitido respuesta alguna.

“El principio de autoridad se perdió”

Héctor Gerardo Cáceres, ex jefe de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga y consultor en materia de movilidad, señaló que “el principio de autoridad de Tránsito se perdió en Bucaramanga. Aquí los conductores paran y estacionan donde quieren, giran por donde se les antoja, hacen contravía en donde sea. La Dirección de Tránsito Local no tiene continuidad en los procesos y campañas que se emprenden, y le hace falta la ejecución de proyectos pedagógicos”.

Cáceres complementó su concepto señalando que “el factor primordial para contrarrestar el mal parqueo es la educación, pues el objetivo principal de una entidad de Tránsito es la prevención y no la sanción; mientras en la ciudad se hace es lo contrario”.

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Publicado por José Luis Pineda

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