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Bucaramanga
Domingo 07 de marzo de 2021 - 12:00 PM

Mujeres: líderes para cerrar las brechas de género en la era postpandemia

Las mujeres en todo el mundo, particularmente en Colombia y, por supuesto, en Santander, han estado al frente de la crisis que desató la pandemia por COVID-19 desde el año pasado. Y el llamado mundial es para que sigan buscando el liderazgo en el trabajo que hay en adelante para cerrar las brechas de género.

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Freepik/VANGUARDIA
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Las mujeres en todo el mundo, particularmente en Colombia y, por supuesto, en Santander, han estado al frente de la crisis que desató la pandemia por COVID-19 desde el año pasado.

Como trabajadoras de la salud, cuidadoras, innovadoras, lideresas en sus comunidades y en los cargos de representación, han alzado sus voces para poner de relieve las carga desproporcionada que la pandemia puso sobre sus hombros: en el hogar, teletrabajando y haciendo a la vez trabajo doméstico no remunerado de manera desproporcionada; al perder sus empleos y ver disminuidos sus ingresos ya de por sí vulnerables en el sector informal y, una de los síntomas más graves, luchando contra el significativo aumento de la violencia intrafamiliar, sexual, física y psicológica.

Sin embargo, las mujeres líderes y las organizaciones de mujeres han demostrado su capacidad para salir adelante durante la crisis que trajo la pandemia y hoy se promueve desde diferentes áreas en la economía y los cargos de representación la importancia de disminuir las brechas de género que impiden la equidad y, por tanto, el desarrollo del país.

Lamentablemente, las mujeres líderes tanto en el sector público como en el privado señalan que la pandemia produjo un grave retroceso en la lucha por alcanzar esta equidad.

“Ya teníamos unas brechas grandes, de alrededor de 3 puntos porcentuales de diferencia en cuanto al empleo y unas brechas de hasta de 17 por ciento en términos de salario, lo cual ya era dramático, pero la pandemia ampliado por completo el problema del desempleo de las mujeres”, explicó a Vanguardia Sylvia Escovar, Asesora Corporativa y miembro de Juntas Directivas.

Por su parte, Martha Moreno, Presidente Ejecutiva de Certicámara, señaló a Vanguardia que “la brecha es demasiado grande: es injusto que las mujeres hayamos recibido un 87 por ciento de lo que ganaron los hombres en los últimos años aún cuando estamos haciendo exactamente el mismo trabajo”.

Y es en las áreas de tomas de decisiones donde esta brecha de género se nota mucho más: según el informe “Cerrando brechas: equidad de género en el sector empresarial”, presentado el 3 de marzo pasado por la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), señaló que solo el 25 por ciento de los cargos de junta directiva o consejo directivo en el país es ocupado por mujeres y solo 33,5% de ellas tienen cargos directivos de primer nivel, como las presidencias o gerencias generales de las compañías.

A nivel mundial, un informe de la consultora inglesa McKinsey & Company mostró que la igualdad de género real aportaría 28 billones de dólares al PIB mundial.

Lamentablemente, Escovar señala que las perspectivas más positivas señalan que, con la pandemia, tomaría alrededor de 100 años alcanzar la equidad. Las perspectivas más sombrías señalan que serían unos 250 años.

“Si no hacemos algo realmente disruptivo vamos a demorarnos todos esos años en llegar a una equidad y la verdad es que el mundo no nos puede esperar”, explica Sylvia Escovar.

A continuación, y teniendo en cuenta el nuevo panorama que se vislumbra tras la incertidumbre de la pandemia, dos mujeres líderes del país tanto en el sector público como en el privado, Martha Moreno Mesa y Sylvia Escova ofrecen sus recomendaciones para hacer posible la equidad.

Martha Moreno, Presidente Ejecutiva de Certicámara, cuenta con una vasta experiencia en cargos de liderazgo y, por supuesto, cuenta también con el temple no solo para ejercerlos, sino también para hacer transformaciones importantes que ratifican las capacidades de las mujeres en los puestos que requieren tomar decisiones importantes.

Moreno es oriunda de Málaga y asegura que este liderazgo le viene de su mamá, quien trabajó duro para convertir a capital de la provincia de García Rovira en la ciudad universitaria que hoy es.

Uno de sus primeros acercamientos con el contexto de la mujer en el trabajo lo realizó como directora de la Asociación de Floricultores del Norte de la Sabana.

“Siendo una actividad que estaba dominada por mujeres empezamos a entender mucho el contexto de trabajo de estas mujeres, de procedencia campesina, de pasar de estar en la casa a ser líderes económicas de sus hogares y a reconstruir su papel protagónico como mujeres en el desarrollo”.

Durante la década del 2000, Moreno relató esta experiencia de éxito ante la Organización de Estados Americanos.

¿Cuáles son las características de una mujer líder y que pueden transformar no solo su espacio de trabajo sino también un contexto más amplio?

“Para cualquier líder, lo que les digo a mis hijos y se le digo a cualquiera: hay que prepararse amorosamente para afrontar los retos que la vida le otorgan a uno. Para ser una buena líder no hay que dejar de ser una buena empresaria, ni dejar de ser una buena mujer en las relaciones afectivas, de pareja, con los hijos, con la familia. Se puede perfectamente cumplir un buen papel de mamá y de mujer trabajadora, ser buena amiga. Hay que aprender a combinar perfectamente los espacios sin dejar la feminidad de los valores que tenemos como mujeres”.

¿Qué ha podido ver en este último año con relación a las brechas que existen en el trabajo y los cargos de liderazgo entre hombres y mujeres?

“Infortunadamente la pandemia nos puso en un punto de inflexión, de retroceso en los avances que habíamos tenido y que se expresó en esa gran cantidad de pérdidas de trabajo de las mujeres y la violencia al interior de los hogares contra las mujeres. Hemos avanzado en algunos sectores, en algunas áreas, pero también es cierto que todavía tenemos muchísimas taras culturales que nos impiden avanzar de manera adecuada.

“La independencia económica es darles a las mujeres el protagonismo que necesitan y merecen para poder avanzar en este mundo, lo que implica acabar con el machismo empezando por una educación distinta para que los hombres y mujeres tengamos condiciones de igualdad tanto en los espacios laborales como los espacios familiares”.

¿Cómo ve la brecha salarial?

“Esta brecha es demasiado grande: es injusto que sigamos siendo pagadas por debajo de los hombres haciendo el mismo trabajo. Recibimos el 87% de lo que ganaron los hombres haciendo exactamente lo mismo”.

¿Qué estrategias se pueden emplear para cerrar estas brechas?

“Soy partidaria de que una de las principales estrategias es la información que debemos tener los empresarios sea pública: de esa manera garantizamos que todas las políticas salariales, las exigencias de contratación, las posibilidad de formación, de ascenso, estén expresadas de manera equitativa, sin consideraciones de género a no ser que el cargo lo exija.

“En eso las cámaras de comercio, que son nuestros nuestros fundadores, han sido bastantes abiertos en términos de invitar y convidar a todas las poblaciones para que se capaciten en apoyar los emprendimientos audaces de las mujeres.

“Así mismo, debemos dejar de tener miedo de hacer parte de grupos de mujeres porque, en muchas ocasiones, en espacios como los nuestros, dónde lo cultural sigue siendo tan fuerte, estar agremiadas nos ayuda”.

Sylvia Escovar ha visto de cerca, en su trabajo tanto en el sector público como el privado, la importancia de que las mujeres se ubiquen en cargos de tomas de decisiones para poder hacer así un cambio transversal de cultura que les permita lograr una equidad laboral.

“Cuando entré en el sector privado empecé a darme cuenta de que había una brecha entre mujeres y hombres en los cargos donde no se toman muchas decisiones, pero esa brecha empieza a ser mucho más grande en la medida en que llegamos al nivel de decisiones”, explica.

Y agrega que “son las decisiones las que las que cambian la productividad, son las decisiones las que cambian la cultura”.

Escovar señala que, en cuanto a las características de una mujer líder, es importante reconocer que a las mujeres “se nos relega en cargos y actividades que se consideran únicamente masculinas y lo que he venido aprendiendo es que tanto hombres como mujeres tenemos características de liderazgo.

“Tenemos unas características que se nos han aceptado como el tema de cuidar los recursos, porque siempre hemos estado en la casa cuidando lo poquito o lo mucho que tenemos; el cuidado de la gente, porque también hemos estado asignadas a ese mismo cargo que es el cuidado del hogar, pero también tenemos cuidado con la gente”.

¿Cómo ve la representación de las mujeres en los cargos importantes tanto del sector privado como del sector público?

“Veo muy poca participación. Lo positivo es que ya veo muchos líderes hombres muy conscientes de este tema de las mujeres, abriendo espacios, abogando por las mujeres y creando las opciones para que más mujeres lleguen a cargos de liderazgo, pero nos falta mucho.

“Las brechas que existen en la participación de hombres y mujeres en cargos directivos es supremamente alta, lo cual es gravísimo. Cerca del 40% de la población que podría ser estar produciendo en momentos en los que lo que necesitamos es producir.

“Y lo estamos perdiendo porque muchas mujeres han sido educadas para pensar que no son capaces de ocupar esos lugares.

“Hay que empezar porque papá y mamá las impulsen a estudiar cualquier tipo de carrera, pero principalmente matemáticas, tecnología, porque cada vez hay más cargos en esos temas. Tenemos que impulsar a nuestras niñas, a nuestras jóvenes para que estudien y se capaciten en estos temas, para que luego puedan ocupar los cargos de liderazgo.

“Hemos dado pasos grandes hacia delante, pero estudios demuestran que cerrar las brechas en los casos más optimistas tardaría 100 años en los más pesimistas, 250 años.

“Si no hacemos algo realmente disruptivo vamos a demorarnos todos esos años en llegar a una equidad y la verdad es que el mundo no nos puede esperar”.

¿Cómo cree que ha impactado la pandemia en las brechas entre hombres y mujeres?

“La pandemia ha sido una tragedia para el tema de las mujeres y su acceso no sólo de empleo sino salarial. Ya teníamos unas brechas grandes, de alrededor de 3 puntos de diferencia en cuanto al empleo y unas brechas hasta de 17% en términos de igual actividad, lo cual es dramático.

“Estábamos un poco más abajo a nivel latinoamericano, pero la pandemia ha ampliado el tema del desempleo.

“Nos vamos a demorar mucho en devolvernos a los niveles que ya habíamos conseguido en el 2019 y que ya eran preocupantes.

Creo que tanto el gobierno como el sector privado tenemos todos que trabajar en regresar a ese 2019 arrancar con todo para cerrar estas brechas”.

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Publicado por Paola Esteban

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