Cuando ya la marcha había culminado, un hombre intentó provocar desmanes en la Plaza Cívica Luis Carlos Galán, pero fue frenado por decenas de personas.
La marcha del 21 de noviembre había terminado, sin embargo, decenas de personas continuaban apostadas en la Plaza Cívica Luis Carlos Galán, en pleno corazón de Bucaramanga, entonando canciones de protesta, cuando un hombre irrumpió la tranquilidad.
A pesar de que la jornada fue en completa calma en la capital santandereana, el hombre se quitó la camisa y de manera desafiante, retó a los uniformados que permanecían en la entrada del Palacio de Justicia.
“Empezó a gritarles, a patear las vallas de seguridad para provocar a los policía, pero los uniformados no respondieron”, manifestó un testigo.
Ante esto, los manifestantes empezaron a gritarle mensajes de no a la violencia, lo agarraron y lo sacaron de la plaza.
Cuando parecía que todo había retornado a la calma, el hombre regresó armado con botellas y empezó a lanzarlas contra los policías quienes no respondieron a la agresión.
Al ver que el agresor continuaba incitando a la violencia, se vio el mejor gesto de paz que remató la buena jornada que se vivió en Bucaramanga.
“Un grupo de personas se subió a las escaleras, se ubicó delante de los uniformados y en señal de paz, levantaron las manos para protegerlos mientras gritaban ‘somos un pueblo decente’. Seguido, entonaron los himnos de Santander y de Colombia; mientras que el agresor era sacado de la plaza”.
Lo mismo ocurrió en la entrada de la Alcaldía, una cadena de estudiantes se interpuso entre la Policía y los vándalos, pero una vez más, los santandereanos demostraron que es mejor ‘llevar la fiesta en paz’.
Algunos uniformados de la Fuerza Disponible fueron ingresados al Palacio y las luces fueron apagadas para dispersar a los vándalos encapuchados.
*Video: Alexandra Franco
