La Cancillería solicitó información a Venezuela sobre el proceso judicial de la excongresista, quien es señalada por corrupción electoral y violación de topes.
El Gobierno de Gustavo Petro está preparando el terreno para la extradición a Colombia de la excongresista conservadora Aida Merlano, quien se encuentra presa en Venezuela, a donde huyó después de protagonizar una cinematográfica fuga de un consultorio odontológico en Bogotá en 2019, y tiene procesos pendientes con la justicia por posible corrupción electoral y violación de topes, conductas que habrían ocurrido en la campaña para las legislativas de 2018.
Ya la Cancillería y la Embajada de Colombia en Venezuela le pidieron a la Fiscalía del régimen la información sobre el estatus legal de Merlano en ese país. Incluso, el embajador ante Caracas, Armando Benedetti, alista una posible reunión con ella.
Benedetti aseguró que “si eso lo hacen rápido (la petición a la justicia venezolana) y yo estoy al tanto de eso, queremos que sea lo más rápido posible, porque así lo pidió el presidente Petro”.
Es más, Merlano manifestó su interés de regresar a Colombia el pasado 19 de enero. “Yo sí quiero darle la cara a la justicia y asumir todos los procesos jurídicos que tengo en curso en contra de todas las personas que denuncié por corrupción y sobornos, y que son totalmente aislados al tema de hoy”, había apuntado.
La excongresista ha estado vinculada a dos casas políticas: los Gerlein (conservadores) y los Char (Cambio Radical). Incluso, fue cercana al político Julio Gerlein y al exalcalde de Barranquilla, Alejandro Char.
Es tal la discordia por las declaraciones que podría dar Merlano que el cacique de la casa Char y padre del exalcalde barranquillero, Fuad Char, salió ante los medios a decir que sus declaraciones son “contradictorias”.
“Estamos dispuestos a agotar todas las instancias jurídicas para aclarar todo este entramado de mentiras que la señora ha declarado en nuestra contra. A lo largo del proceso ha presentado versiones contradictorias e incoherentes, llama la atención que todo lo dicho ante los medios y la justicia carezca de falta de pruebas”, aseveró Fuar Char.
Aida Merlano es prófuga de la justicia desde octubre de 2019, cuando aprovechó el permiso para salir de la cárcel por una cita odontológica para fugarse por una ventana del consultorio en el que era atendida.
De acuerdo con el embajador Benedetti, el tiempo que ella ha permanecido presa en Venezuela podría servirle para bajar la pena o los días que debería pagar de condena en Colombia.
Su arribo a Colombia se daría en pleno contexto electoral para los comicios regionales de 2023 en los que ya hay una puja marcada entre el Pacto Histórico, Cambio Radical y el Conservador por las gobernaciones y las alcaldías de la costa.
