La Organización Nacional Indígena de Colombia Onic, invitó a todos los sectores sociales y populares, campesinos, afrodescendientes, estudiantes, trabajadores, transportadores, comunidades Lgtbi, gremios y demás actores nacionales, para que se unan en favor de la paz y se realice una gran movilización nacional el próximo 25 de noviembre.
La iniciativa parte luego del análisis que hicieron las organizaciones regionales y zonales agrupadas en la Onic, sobre la situación actual del país, teniendo en cuenta la muerte de dos indígenas en el Cauca, a lo que también se sumó el secuestro de dos soldados en Arauca y el plagio del brigadier general Rubén Darío Alzate, el cabo Jorge Rodríguez y la civil Gloria Urrego.
“Los Pueblos Indígenas aún estamos despidiendo a nuestros dos miembros de la guardia indígena del Pueblo Nasa y del Consejo Regional Indígena del Cauca, que recientemente fueron asesinados en medio de circunstancias de abierta violación al Derecho Internacional Humanitario, quienes desde nuestra cosmovisión son seres humanos con el mismo valor que un General o cualquier persona con rango dentro de instituciones de la sociedad mayoritaria. Aún así, mantenemos nuestra posición de exigencia a la búsqueda de una salida política al conflicto armado”, señalaron en un comunicado.
En ese sentido, la Onic manifestó que “resulta extraño y preocupante que como consecuencia de un hecho que si bien es grave, que acontece entre actores del conflicto armado, en circunstancias enrarecidas, y en el cual están involucrados el señor Brigadier General Rubén Darío Alzate Mora y dos acompañantes, así como guerrilleros de las Farc, se ponga en riesgo un proceso de paz que le pertenece a todos los colombianos y no a un sector de la sociedad o a la cúpula militar únicamente”.
Dentro de la misiva, aseguraron que el Movimiento Indígena pone al servicio de la paz y del pueblo colombiano la estrategia milenaria de resistencia. “En caso de una liberación por parte de las Farc, estamos dispuestos a realizar una 'Minga Indígena Humanitaria', liderada por centenares de guardias indígenas de los distintos territorios del país, sabios, líderes y lideresas con el fin de lograr que el Brigadier General Rubén Darío Alzate Mora y sus acompañantes retornen a la libertad, sanos y salvos a la brevedad”.
Finalmente, la Onic resaltó que desde que se iniciaron las conversaciones han insistido de los riesgos que implica avanzar en dichos diálogos en medio de la confrontación armada. Sin embargo, “las circunstancias actuales conllevan a plantear la necesidad urgente de un cese al fuego bilateral, como una muestra la real voluntad de paz de los actores armados con el Pueblo Colombiano y con los diálogos”.