Transparente, imparcial, con una amplia experiencia en las investigaciones de corrupción y sin vínculos con los implicados del caso Odebrecht, debería ser el perfil del nuevo fiscal ad hoc según los analistas.
Últimamente, hablar de corrupción en Colombia es hablar del caso Odebrecht, una ‘olla’ que, desde que se destapó, ha salpicado a algunos de los más altos funcionarios y empresarios del país.
En efecto, el escándalo con la compañía brasilera ha involucrado al Grupo Aval, Corficolombiana, al expresidente Juan Manuel Santos e incluso los posibles vínculos del ahora presidente Iván Duque, muchos de ellos acusados de haber recibido dinero de la constructora.
Aunque la Fiscalía adelantaba las investigaciones relacionadas con uno de los casos de corrupción más grandes de la historia, fueron las declaraciones de Jorge Enrique Pizano, testigo clave del caso Odebrecht, las que pusieron en el ‘ojo del huracán’ a dicha institución y al fiscal general Néstor Humberto Martínez, quien, al parecer, sabía de las irregularidades.
A raíz de la polémica, la Corte Suprema de Justicia avaló el nombramiento de un fiscal ad hoc que se encargará de la investigación de solo tres de los 25 procesos relacionados con la firma. Es decir, solo el 12% de la investigación.
Si bien es el presidente Iván Duque el encargado de ternar a los tres investigadores, las dudas de la ‘transparencia’ en la elección es otra de las tantas aristas de este caso.
¿Cómo debería ser el fiscal?
Tener bajo la lupa una de las investigaciones de corrupción más grandes de la historia del país, trae consigo un alto grado de responsabilidad en donde la ética, la independencia y la objetividad se convierten en factores claves.
Así lo explica David Murillo Cruz, analista político de la Universidad Libre, quien hace énfasis en la importancia de ternar académicos penalistas con experiencia en temas de material probatorio en asuntos de corrupción.
“El fiscal ad hoc no debe tener vínculo con ninguna de las empresas ni personajes relacionados con el caso. Por eso, lo más acertado es buscar a los ternados en la academia y no en el ejercicio del litigio. El Presidente debe apoyarse en las universidades para conocer los perfiles de los opcionados”, dijo Murillo Cruz.
No obstante, el analista manifestó su preocupación frente al posible hecho de que el nuevo investigador tenga relación con los vinculados.
“Yo tengo serias dudas sobre la terna del Presidente, quien es cuestionado por sus presuntas relaciones con Odebrecht y de beneficios económicos. Esto perjudicaría la investigación en temas de imparcialidad”, concretó David Murillo Cruz.
Además, el experto señaló que lo correcto sería que este nuevo fiscal se hiciera cargo de toda la investigación y no solo de un fracción de ella.
La Fiscalía, ¿con trabas
en la investigación?
Luego de que la Corte Suprema aceptara el impedimento que presentó la vicefiscal María Paulina Riveros en compañía del fiscal Néstor Humberto Martínez, señalado de conocer las irregularidades antes de llegar al cargo, es la Fiscalía la que quedó en el limbo en cuestiones de credibilidad y transparencia.
De este modo, según explican los expertos, lo correcto sería que el fiscal ad hoc pudiera designar su propio equipo de investigadores.
“Yo creo que la Corte Suprema de Justicia debería darle la autorización a ese fiscal ad hoc para acudir a un equipo que pueda integrarse también con funcionarios de otras instituciones, como la Procuraduría General”, manifestó José Gregorio Hernández, expresidente de la Corte Constitucional.
Lo anterior ocurre, teniendo en cuenta que el nuevo designado trabajará con investigadores que antes estaban bajo la dirección del Fiscal General y la Vicefiscal.
“Es que el perfil del fiscal se resume en dos palabras: independencia e imparcialidad. No puede existir ningún vínculo con los implicados en el caso, para que pueda actuar como se debe”, dijo Hernández.
El expresidente de la Corte Constitucional agregó que además de esas características, el nuevo fiscal debería ser el encargado de investigar todos los procesos relacionados con el caso y no solo tres de ellos, con el fin de alejar al Fiscal General de este expediente.
Finalmente, Hernández hizo un llamado para que el presidente Iván Duque agilice la terna.
“Confiemos en que el Presidente presentará una terna compuesta por juristas que sean independientes, autónomos y totalmente imparciales, lo más pronto posible”.
El papel del fiscal ad hoc
Para el analista político Andrés Mejía, el papel que desempeñará el fiscal ad hoc es de suma importancia, al tratarse de un caso de corrupción de este tipo. Considera fundamental que el designado tenga formación como jurista y que dé “confianza” a la opinión.
“La razón por la que se designa un funcionario ad hoc es porque se cree que el funcionario titular tiene compromisos o un impedimento para realizar su función. En el caso del fiscal general, Néstor Humberto Martínez, hay un impedimento que obedece a sus vínculos con Corficolombiana”, señaló Mejía.
Además, insistió en que el fiscal ad hoc debe tener la libertad de adelantar las investigaciones sin sentir presiones relacionadas al tiempo de las mismas. “Creo que se le debería dar la designación por un tiempo indeterminado hasta culminar la investigación, porque en Colombia, los abogados son expertos en dilatar los procesos y se le pone una fecha límite al fiscal, los abogados de los posibles acusados utilizarán este recurso”, concretó el analista.