Desde una cárcel en Estados Unidos, el exjefe capo del Cartel de Cali Miguel Rodríguez Orejuela le aseguró al Juzgado Primero Especializado de Cundinamarca que sus hijos no son testaferros del narcotráfico, esto en desarrollo de un juicio que se les sigue a los familiares de Gilberto y Miguel Rodríguez Orejuela por lavado de activos.
Frente a la pregunta de si su familia había lavado dinero del narcotráfico, en negocios como el de Drogas La Rebaja, Rodríguez Orejuela fue contundente al señalar que nunca sus hijos hicieron ese tipo de prácticas.
"En absoluto, ellos no hicieron ningún tipo de lavado de activos(...) A ellos les pusimos una muralla de frente, la que no les permitía en absoluto hablar o relacionarse con algún tema del narcotráfico, especialmente esto con nuestros hijos", dijo Rodríguez.
"Nunca hubo ni siquiera una charla con ellos, sobre lavado de activos y narcotráfico, ellos no tenían ninguna relación", señaló Miguel Rodríguez Orejuela, al explicar que había un tipo de "blindaje", para que su familia no se acercara a las actividades del Cartel de Cali.
Ante los señalamientos de la Fiscalía, que apuntan que Miguel y Gilberto eran propietarios de negocios como Drogas La Rebaja, después de que fueron capturados por las autoridades en 1995, Rodríguez volvió a negar estos señalamientos.
"Señor abogado y a toda la audiencia, nosotros somos padres, y nos tuvimos que presentar ante la Justicia de Estados Unidos, para enfrentar una pena de 30 años de prisión y vamos a terminar nuestra vida en una cárcel en Estados Unidos, pero queremos defender a nuestros hijos de esta injusticia, sabiendo que no se tienen las pruebas suficientes", manifestó el excapo.
La disputa con Pablo Escobar
También, el extraditado capo de las drogas aseguró que “Pablo Escobar inició una guerra con el Estado, y contra él desde 1987 y que sólo terminó hasta cuando Escobar murió”.