Tras conocerse el anuncio de los gobiernos de Estados Unidos y Cuba, de establecer diálogos para reanudar las relaciones diplomáticas tras 54 años de bloqueo, distintos sectores de la política colombiana dieron sus opiniones.
El presidente del Partido de la U, Roy Barreras, afirmó que se sentía satisfecho con la noticia, “el deshielo de estas relaciones y los canales de comunicación de presidente a presidente que se abren a partir de hoy significan entre otras cosas el fin del último residuo de lo que se llamó la guerra fría y también la desaparición del último escollo para una integración continental de América Latina entre sí y de Latinoamérica con los Estados Unidos de Norteamérica, lo que tendrá un gran impacto en la estabilidad política de la región y en todos los procesos de integración económica, social y cultural del hemisferio”, dijo Barreras.
Agregó que esta relación que se establece podría darle un impulso al proceso de paz. Entre otras cosas dijo que esta acción combate el discurso sobre el llamado “castrichavismo” y expone un nuevo modelo del “Obama castrismo”.
Los sectores de izquierda también se manifestaron, Clara López, presidenta del Polo Democrático indicó que “con estas decisiones se empieza a cerrar el capítulo de la Guerra Fría en América Latina que tantas implicaciones negativas en derechos humanos y en democracia ha tenido a través de la doctrina de Seguridad Nacional en el continente”.
López, calificó de valerosa la decisión del presidente Obama, la cual –dijo- tendrá sin duda repercusiones en la política exterior norteamericana, e incluso en el proceso de negociación entre el gobierno colombiano y la insurgencia de las Farc.
Por otro lado, el líder del Centro Democrático, Álvaro Uribe Vélez, afirmó en su cuenta de Twitter que: “Ninguna decisión entre Estados Unidos y Cuba nos debe llevar a aceptar que el castrismo imponga un Gobierno de la terrorista Farc”.
