Eco San Gil y Acuasan libran desde hace un par de meses una lucha por quedarse con los clientes, lo que ha generado enfrentamientos y quejas en diferentes espacios.
En la discusión que duró más de cuatro horas, de nuevo miembros de la comunidad y representantes del sindicato Sintraemsdes pidieron no abrir la puerta a una empresa privada al manejo del patrimonio público.
El avance de las obras, las ayudas para la reposición de sus bienes y el arreglo de la calles, son las principales preocupaciones de la comunidad del barrio Paseo del Mango en San Gil.
Con la adquisición Acuasan podrá producir la energía que necesita para su funcionamiento. También, buscará suministrar el servicio a diferentes sectores del municipio a futuro.