Cerca de 1.500 personas, en su mayoría mujeres y niños, están en condiciones inhumanas en cuatro campos de desplazados situados en Poste Marchand, como consecuencia de la nueva ola de violencia que vive Haití.
La zozobra, miedo e incertidumbre agobia a los habitantes de Saravena tras el carrobomba que detonó en la madrugada de este jueves. El sentimiento se comparte en Arauca, principalmente en los municipios fronterizos con Venezuela.