Cerca de 31 familias víctimas de ‘falsos positivos’ en la región del Catatumbo, en Norte de Santander, pidieron este jueves al Ministerio de Defensa y al Ejército acabar con la violencia para poder vivir con normalidad.

El teniente coronel Juan Carlos Figueroa Suárez, que fue comandante del Batallón de Artillería No. 2 La Popa en Valledupar, fue acusado de presuntos de crímenes de lesa humanidad, informó este jueves la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

El general Jaime Alfonso Lasprilla Villamizar, excomandante del Ejército entre 2014 y 2015 durante el gobierno de Juan Manuel Santos, fue imputado este lunes por la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, por crímenes de guerra y lesa humanidad ocurridos entre 2005 y 2008.

El mayor general (r) Marcos Evangelista Pinto, nacido en Bucaramanga y quien fue comandante de la Segunda División del Ejército Nacional (2020-2021), fue uno de los 35 militares imputados por la JEP por el subcaso de falsos positivos en Huila.

La Jurisdicción Especial para la Paz, JEP, imputó a 35 miembros del Ejército Nacional de Colombia por crímenes de guerra, al estar, aparentemente, involucrados en ejecuciones extrajudiciales o mal llamados 'falsos positivos'.

El exmandatario afirmó que se trata de una persecución que lleva décadas y no se negará a colaborar con las justicia argentina.

Amparados por el principio de universalidad, familiares de víctimas y organizaciones de derechos humanos llegaron a Buenos Aires para pedir que el expresidente Álvaro Uribe sea investigado por las ejecuciones extrajudiciales durante su Gobierno.

El Ministerio de Defensa reconoció los crímenes de ejecuciones extrajudiciales en Soacha y una de las víctimas dijo que nunca perdonará a los uniformados del Ejército que asesinaron a su papá.

El expresidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, se refirió al discurso del presidente Gustavo Petro en el acto de excusas públicas a las madres de Soacha por los falsos positivos.

Este martes 3 de octubre el Ministerio de Defensa realiza un Acto de Excusas Públicas desde la Plaza de Bolívar por los casos de ejecuciones extrajudiciales –conocidos como falsos positivos– de las que fueron víctimas jóvenes residentes en Bogotá y en Soacha (Cundinamarca).