Un ataque suicida contra una mezquita dejó este lunes al menos 27 muertos, entre ellos varios policías, y 140 heridos en la ciudad de Peshawar, en el noroeste de Pakistán, un suceso que llevó a las autoridades a declararse "en estado de guerra" contra el terrorismo.
Las autoridades de Pakistán han liberado a más de 520 ciudadanos afganos, entre ellos 97 niños, que se encontraban en los centros de detención del país.
El agente Nadeem Abbas, un oficial de policía que se encontraba de servicio durante la marcha, explicó que "en el ataque una persona murió y otras nueve resultaron heridas".
La premio Nobel de la Paz Malala Yousafzai expresó este miércoles su preocupación por el cierre de centenares de escuelas en zonas afectadas por las inundaciones en Pakistán.
Al menos 18 personas murieron y otras 23 resultaron heridas este viernes en un atentado suicida en las proximidades de una mezquita en el oeste de Afganistán.
El Gobierno de Pakistán ha asegurado que está usando todos los recursos y capacidades posibles, sin embargo, admitió que la magnitud de la calamidad ha sobrepasado su capacidad.
Pakistán destacó ayer su papel en la lucha contra el terrorismo tras el anuncio del presidente, Joe Biden, de que el líder de Al Qaeda, Ayman al Zawahiri, murió.
Las dos mujeres, de 21 y 24 años, se negaron a contraer sendos matrimonios arreglados por sus parientes que las torturaron, estrangularon y remataron a tiros.
