Con los pelos de ‘punta’ quedó un arenero cuando en medio de sus labores de extracción del material en la orilla del Río de Oro, se percató de un cuerpo flotando en las aguas.
Los recursos se dirigieron a tres contratos de obras para la construcción de muros de contención como medida para mitigar el riesgo por inundación, socavación y fenómenos de remoción en masa.
Luis Carlos Quintero quedó inválido tras una herida que afectó su médula espinal. Esta es la historia de un hombre que ahora necesita una silla de ruedas para su movilidad.