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Fútbol local
Lunes 09 de agosto de 2021 - 12:00 PM

Ni una pandemia pudo acabar la fidelidad de las barras del Atlético Bucaramanga

El amor y la pasión que sienten los hinchas de Atlético Bucaramanga por su escudo, siguió latente a pesar de un virus letal. La barras del 'Leopardo' son un emblema latente en el ambiente futbolístico que, a pesar de haber estado lejos de su equipo por más de 200 días, se mantuvieron al pie del cañón.

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Suministrada / VANGUARDIA
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Suministrada / VANGUARDIA

Atlético Bucaramanga es símbolo de pasión y aguante para sus hinchas.

Por más de 71 años, niños, jóvenes y viejos han esperado por ver al 'equipo de sus amores' sumar la anhelada primera estrella. Es por esto que lo acompañaron desde sus tres descensos, hasta una pandemia mundial.

La Tienda Leoparda 'la vieja guardia', la 'Fortaleza Leoparda Sur', y 'Coraje Leopardo', son algunas de las barras fieles que acompañan al equipo insignia de Santander. Ellos buscaron la manera de seguir en contacto y a pesar de haber perdido miembros debido al Covid-19, siguen alzando el verde y amarillo de la bandera de su equipo.

Coraje Leopardo

Esta barra nació el primero de agosto de 2015 en Bogotá, como una necesidad de unir a la colonia santandereana en la capital del país.

Según uno de sus líderes, el reconocido 'enmascarado' leopardo, el perfil de la barra es que todos son emprendedores y empresarios que se radicaron en Bogotá por el tema laboral, pero que tienen como sueño volver a la tierra donde nacieron.

Su nombre nace del himno de Santander: "Con el coraje, por estandarte y como escudo la libertad". Estas son las palabras detrás de la marca de esta barra. "Para ser hincha del Bucaramanga se necesita mucho coraje", afirman los miembros.

Cuando pueden asistir al estadio Alfonso López, se ubican en sombra baja. Sin embargo, tratan de acompañar al equipo en todos los estadios del país.

"La barra hace diferentes actividades. Hacemos 'tamaladas', en donde nos envían tamales desde Bucaramanga y acá los disfrutamos. Todo esto lo hacíamos antes de pandemia, una vez por semana", asegura.

Para el 'Coraje Leopardo', la pandemia fue una oportunidad para reinventarse como barra y demostrar la pasión. Comenzaron a reunirse por Zoom, y como no había fútbol, durante las llamadas recordaban los mejores momentos y partidos del equipo de sus amores.

"Vimos la importancia de mantenernos unidos y nos afianzamos como barra. Gracias a Dios ninguno de la barra murió. A la mayoría les di el Covid-19 pero todo seguimos aquí", comentó el 'enmascarado' leopardo.

Es el caso de Manuel Moreno, uno de los co-creadores de la barra, quien sufrió el coronavirus en dos ocasiones pero logró surgir de la enfermedad. En total, hoy en día son 758 integrantes activos en Bogotá y 232 en Bucaramanga.

Fortaleza Leoparda Sur

La 'FLS' es para muchos la barra más emblemática de la ciudad. Fundada en 1998, después de la buena campaña del equipo en 1997 donde ganó el torneo finalización gracias a un gol del 'fantasma' Ballesteros en Quindío, para los fundadores de esta barra 'perder es ganar un poco'.

El 'leopardo' no pudo llevarse la final que disputaría ese año después del partido en Quindío, sin embargo, para los hinchas, esos momentos de efervescencia y calor, llevaron a que naciera la idea de conformar algo en serio, algo que hiciera sentir la verdadera fiesta del futbol. Ya se empezaban en aquel entonces a ver los trapos colgando en el estadio, y a entonar canciones.

Hoy en día, con más de 300 miembros, la Fortaleza ha logrado consolidar una familia para todos los amantes del fútbol. Con una organización bien planteada, cuentan con murga, prensa y realizan labores sociales.

"Cuando empezó pandemia, hicimos un evento, un campeonato relámpago de banquitas para el siguiente partido poder ir de viaje, cuando de re repente cerraron los estadios. Todo fue muy abrupto, era muy complicado reunirnos, por pico y cédula y demás. Así que tuvimos que parar", comenta Fabián Camacho, integrante de la murga, encargada de ponerle música a la fiesta del fútbo.

Según él, con el paso del tiempo y el levantamiento de ciertas restricciones, los integrantes de la FLS pudieron comenzar a retomar actividades físicas y encuentros. La murga comenzó a verse en lugares específicos para ensayar.

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"Alquilábamos canchas sintéticas en Girón para ensayar un día a la semana al principio. Después de un tiempo, cuando inició el fútbol sin público, acompañamos al equipo al aeropuerto para recordarle al equipo que a pesar de que no nos vieran en las tribunas, estábamos con ellos", agrega Fabián.

Durante la pandemia, muchos de los integrantes sufrieron el fenómeno global que se esparció casi tan rápido como el mismo virus: el desempleo. Para esto, la murga de la barra tomó la decisión de salir por los barrios a llevarles la cultura del fútbol, y mostrar lo que hacían con sus instrumentos.

Con el paso del tiempo, los toques en la calle finalizaron pues muchos pudieron establecerse nuevamente laboralmente.

"Nos hemos puesto la camiseta dentro de la barra y durante la pandemia realizamos recolección de marcados y comida para los habitantes de calle. Eso nos unió bastante, porque la barra no para, siempre está pendiente de la ciudad y del equipo", comenta Camacho.

Tienda Leoparda 'la vieja guardia'

Esta barra fue fundada por Álvaro Olarte, mayormente conocido en el ambiente futbolístico como 'Fifa', en el 2002.

Álvaro hizo parte de los fundadores de la Fortaleza Leoparda Sur en 1997/98. En el 2001 vio la necesidad de crear un espacio para hinchas en la tribuna sombra, pues consideró que otro espacio del estadio debía alentar también.

"Decidí con mis hijos, y con amigos irnos para sombra y creamos la barra Tienda Leoparda 'la vieja guardia'. Los miembros por lo general venían de otras barras históricas de los años 80/90 que se habían acabado. Recogí integrantes del 'Escuadrón Hormigueros', 'Barra Fiel' que eran de oriental", comenta Álvaro.

Actualmente la barra cuenta con aproximadamente 60 miembros. Su característica principal es la tranquilidad según Álvaro. "Se vive un ambiente muy familiar, padres e hijos se hacen juntos a alentar", agrega.

Por lo general se ubican en occidental baja o sombra general. Todo el que va recurrentemente al estadio, reconoce fácilmente el compresor de más de 150 libras que retumba en el escenario. Esta barra suele organizar excursiones para acompañar al equipo en todos los escenarios donde se presenta.

"Es una barra muy fiel, entre nosotros hay una hermandad, siempre celebramos los cumpleaños, estamos pendientes de las necesidades del otro. Doña Nubia, Gregorio el 'negro', el sargento Ayala, muchos integrantes siguen con nosotros desde el inicio de la barra", agrega 'Fifa'.

Para Tienda Leoparda 'la vieja guardia', la pandemia no fue impedimento para seguir juntos, a través de las redes sociales se organizaron para no perder contacto. El Covid-19 no ha cobrado ningún integrante hasta el momento, y están listos para regresar al estadio.

En los 19 años de historia, la Tienda Leoparda se ha convertido en un museo para los hinchas del 'leopardo'.

"En ese museo reposan más de 170 camisetas originales de jugadores de todas las épocas. He grabado 4 CDS, hemos creado 67 canciones del equipo, y ahorita estoy terminando el libro histórico del Atlético Bucaramanga", menciona Álvaro.

Los hinchas de Atlético Bucaramanga han dejado ver su casta y verraquera santandereana en épocas de crisis.

Para todos aquellos que han heredado el amor al auriverde, cada año es una nueva oportunidad para alcanzar lo que sus abuelos no pudieron ver: el primer título del 'leopardo'.

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Publicado por Tatiana Niño

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