De la Espriella expresó que "hay que sentarse a la mesa de concertación porque le íbamos a pedir al Gobierno que coadministrara la empresa, para que se diera cuenta cómo era su funcionamiento".

Así mismo, reiteró que el Gobierno fue el que "armó el problema para la devolución de los dineros a los inversionistas y que el Gobierno es el que lo debe solucionar, porque DMG no tiene la plata para el reembolso, ya que lo que la firma ofrece son bienes y servicios".

Sobre los señalamientos de lavado de activos o vínculos con el narcotráfico de la empresa, hechas en las últimas horas, el abogado las negó de manera tajante, las calificó de mentiras y recordó que no hay ninguna autoridad que hoy pueda sustentar ese tipo de acusaciones.

DMG presentó a dos inversionistas extranjeros: Alexánder Altshoul, de Canadá, y a Alexandre Ventura, de Brasil. Ellos expusieron las razones por las cuales quieren hacer negocio con David Murcia (dueño de la firma DMG) y a quien conocieron hace un año en Panamá, pero aclararon que no han invertido dinero en Colombia y que sólo piensan hacerlo en Panamá.