Nuestros deportistas merecen un aplauso cerrado por su presentación en los Juegos Nacionales y todos los torneos a los que asisten, porque logran vencer a sus rivales en las pistas de competición, y también la irresponsabilidad e incompetencia de nuestra dirigencia.
Cultura
- Puente de Brooklyn, serie New York, del artista colombiano Alfonso Bonilla. Foto suministrada/VANGUARDIA
La fotografía siguió a la pintura: los avances tecnológicos que se desarrollaron rápidamente a partir de la revolución industrial y de la competencia descarnada por los canales comerciales en el mundo trajo consigo una ola de inventos que, si bien pueden ser cuestionables, en otras ocasiones nos han dado grandes satisfacciones.
La pintura le habla al sentimiento, la fotografía, a la consciencia.
El primer procedimiento fotográfico o heliográfico fue inventado por Niépce hacia 1824 y aunque, como con todo lo nuevo, su llegada vaticinó el final de la pintura, en realidad el arte primó. La pintura y la fotografía rivalizan y fraternan, pero siempre siendo la pintura la precursora.
El artista, nacido en Bogotá, Alfonso Bonilla, por su parte, ha recorrido el camino inverso: sus fotografías se convierten en arte para presentar un concepto de ciudad que se asienta en la fina línea entre el caos y la belleza, que es lo que plantea el expresionismo abstracto.
Alfonso Bonilla fue un éxito en Nueva York el año pasado con su exposición ‘Spectral Narratives’ y en septiembre próximo el Eran Art Gallery representará su lenguaje artístico empezando con una exposición virtual en Artsy y continuando con una exposición en su galería con sede en Toronto, Canadá.
El artista “utiliza las herramientas tecnológicas del diseño gráfico en combinación con una particular exposición de la imagen, que a través de superposiciones y una configuración subjetiva de la composición de cada pieza, busca comunicar su mensaje, ofreciendo una reconfiguración de la realidad a través de cada propuesta de gran riqueza cromática”, indica.
Es hijo de Alfonso Bonilla Naar, importante científico y escritor colombiano, reconocido por su obra ‘La pezuña del Díablo’ y que fue uno de los galenos que atendió a Jorge Eliécer Gaitán el 9 de abril.
El artista habló con Vanguardia sobre su trabajo y su concepto artístico.
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Comunicadora social - periodista egresada de la Universidad Autónoma de Bucaramanga. Desde 2005 hace parte del equipo de Vanguardia, trabajando en crónicas y reportajes premium, los cuales se enfocan en temáticas culturales, población Lgbt, y mujer y género.
Ganadora de un premio Luis Enrique Figueroa en 2007 con ‘Aquí estamos pintados’ y un premio CPB con ‘Diario de una bulimica’ en 2008.
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