Reflexión dominical: ¡No se apegue a nada, la vida siempre fluye!

Si abre su mano y está dispuesto a recibir y a compartir los granos de arena que tiene sobre ella, usted fluye con la vida. Y si el viento sopla, demuestre que puede desapegarse de lo que no le permite crecer.

Si se anima a soltar el control y a fluir con la corriente de la vida, se liberará y tendrá la posibilidad de visualizar otras perspectivas.

Todo es temporal y debe estar dispuesto a adaptarse a los cambios. Deje ir aquello que le está pesando y confíe en que el ‘viento de la vida’ lo llevará por diferentes travesías.

No se trata de ‘correr a mil’ ni de librar grandes batallas, basta con dejar que las mismas circunstancias se den en el tiempo que Dios y el universo lo decidan.

La reflexión de hoy lo invita a estar dispuesto a asumir los cambios, sin que tenga que resignarse a sufrir. Si deja que las experiencias que le regala el diario acontecer fluyan, podrá vivir de una manera más práctica.

No les tenga miedo a las transformaciones porque, más allá de que ellas le generen incertidumbre, todas tienen una razón de ser.

Aunque algo le mueva el piso, vea todo como una oportunidad de crecimiento y de desarrollo personal. En lugar de enfocarse en lo negativo, aprenda las debidas lecciones.

Le reitero que la vida está en una constante evolución, por lo que es importante estar dispuesto a ajustarse y a adaptarse a sus vaivenes.

Si quiere que la rutina deje de incomodarlo y si desea visualizar otro panorama, asuma con entereza las cosas nuevas. En ese sentido, tal vez tenga que recorrer caminos inexplorados.

Reflexione sobre todo lo que está viviendo hoy. Tal vez su realidad le está pidiendo a gritos que se atreva a salir de lo convencional y a incursionar por senderos por los que nunca antes se ha atrevido a transitar.

No se distraiga ni se preocupe por los detalles insignificantes; centre toda su atención en las cosas realmente fundamentales para su existencia.

¡Viva con más pasión! Nada saca con atornillase a las amarguras, a las frustraciones, a los pesares, a los rencores y a los abatimientos.

No se afane demasiado buscando la solución a sus problemas en el baúl de los recuerdos, pues las respuestas de todo yace en lo más profundo de su corazón.

Las dificultades le son puestas por la Divina Providencia para motivarlo a descubrir nuevos aspectos de su poder interior. Al adaptarse a los retos y desafíos, cultivará la fortaleza interior y la confianza en usted mismo. ¡Le envío una buena vibra!

REFLEXIONES CORTAS

Procure estar sereno el mayor tiempo posible. No se desespere si no encuentra respuestas rápidas a sus inquietudes cotidianas; ellas le llegarán cuando menos las espere y cuando la vida misma lo estime conveniente. ¡Permítase madurar y tener un mejor crecimiento espiritual!

Una flor logra vivir en medio del cemento. Se lo menciono para que, en esos momentos en los que todo sea gris, lo más sensato es afianzar su capacidad de superación. Demuestre que es propositivo y ‘florezca’ de forma decidida. Si tiene el coraje necesario y lucha con inteligencia, el triunfo será suyo.

Comuníquese con el Señor, no tanto con las palabras o los pensamientos, sino con la energía amorosa que sale de su propio corazón. Cuando logre de verdad una comunicación permanente con Jesús, entenderá lo valioso que es su bendición y jamás volverá a dudar de su poder creador.

EL CASO DE HOY

Testimonio: “Mi vida ha sido una permanente lucha contra la adversidad y un continuo traspiés. A veces me desanimo mucho porque trastabillo en mis propósitos de salir adelante. ¡Nada me sale! No sé si es que la suerte me abandonó o es que, a la hora del té, plantearse objetivos es inútil. Deme uno de sus consejos. Gracias por leer mi carta”.

Respuesta: En cierta medida, las situaciones complicadas por las que ha pasado, así no lo pueda detectar ahora, le permiten desarrollar y fortalecer su personalidad.

En estos momentos de crisis y de alta tensión no puede perder su espíritu combativo, ni bajar la guardia ante lo que yo definiría como los ‘normales tropiezos’ de la cotidianidad.

Si sigue cultivando energías negativas, ellas podrían neutralizarlo definitivamente. ¡Aléjese de ese pesimismo, así las cosas no le estén saliendo bien!

No es que lo haya abandonado la suerte o que el plantearse objetivos en la vida sea algo “inútil”; creería que está un tanto desorientado y eso le hace errar. La clave del éxito está dentro de usted mismo; es decir, todo depende de la prudencia y de la actitud con la que asuma su diario vivir.

Le sugiero que recurra a la oración. La plegaria hará que sus energías interiores ‘salgan a flote’. Haga acopio de resiliencia para superar esos obstáculos que se le presentan. También sáqueles jugo a las experiencias vividas, pues ellas lo irán moldeando y le permitirán madurar.

Piense de una manera positiva y no permita que el desánimo le gane la partida.

Pídale a Dios sabiduría y claridad para actuar, de tal forma que pueda enfrentar valientemente estos momentos por los que pasa.