Hace pocas horas, Nancy Zuleta, esposa de Jorge Oñate, fue trasladada en el avión del cantante Silvestre Dangond, desde Valledupar a la ciudad de Medellín, para esperar a su amado, quien será trasladado al Hospital Pablo Tabón Uribe por presentar complicaciones en el páncreas y otras patologías por el COVID-19.
Nancy Zuleta se trasladó a la capital antioqueña junto a sus hijos Jorge Luis y Jorge Daniel Oñate. Hasta este momento se espera por la salida del ‘Ruiseñor del Cesar’, quien aún permanece en el Instituto Cardiovascular del Cesar a espera la autorización para su remisión.
Oñate será recibido en el Hospital Pablo Tabón Uribe por el intensivista Cesar Cortés.
A través de un comunicado oficial, el mánager de ‘El Jilguero de América’, José ‘El Mono’ Romero, informó que en Medellín Oñate continuará tratamiento y seguimiento multidisciplinario integral.
“El traslado será en avión ambulancia, donde Jorge Oñate será monitoreado estrictamente por personal médico capacitado, que brindará los cuidados correspondientes y estará atento a su condición clínica”, se lee en el comunicado.
El Hospital Pablo Tobón Uribe es una reconocida institución médica a nivel nacional, que presta servicios especializados de máxima complejidad.
Jorge Oñate permaneció por más de un mes hospitalizado en el Instituto Cardiovascular del Cesar, en el área de cuidado crítico, recibiendo atención médica permanente por parte de un grupo multidisciplinario de probadas condiciones profesionales.
La esposa, hijos y familiares del cantante, agradecieron a todo el personal médico, servicios de enfermería, fisioterapeutas, administrativos y demás personas que durante todo este tiempo le han prestado atención y cuidado. También envían un mensaje de gratitud a los medios de comunicación y a los innumerables seguidores, que han estado atentos al estado de salud del Jilguero de América. Piden tenerlo presente en sus oraciones para su pronta recuperación.
Desde hace más de un mes, el estado de salud del cantante de vallenato ha mantenido en vilo a su fanaticada y seguidores, quienes permanecen orando por su pronta mejoría.
