Con frecuencia escuchamos que no se necesita mucho para ser feliz, pero...acaso lo creemos de verdad Los expertos muestran algunas de las cosas que, aunque le parezca imposible, le pueden dar valiosos momentos de felicidad.
Los daneses son una sociedad muy avanzada: pudiera parecer que no tiene problemas ya que todos tienen un alto nivel de bienestar. Sin embargo, la ausencia de problemas no garantiza la felicidad, y la tasa de suicidios de las sociedades escandinavas lo demuestran.
Para proteger a su sociedad de aquella sensación de vacío, los daneses desarrollaron el concepto “Hygge”: la felicidad está en las pequeñas cosas.
No significan que lo idea es el caos para que nadie se aburra. Por el contrario, para los daneses, una comida sencilla y rica como lo podría ser el caldo calientito que un ser amado nos prepara para consentirnos, es una de las claves de la felicidad.
¡Y no se trata solo de la comida!
“Los daneses piensan que esas pequeñas cosas que hacemos a diario y a las que no prestamos atención porque estamos muy apurados, son las que realmente nos hacen felices. La clave está en detener un poco esta loca carrera y aún si descubre que para usted tiene sentido, se dé la oportunidad de alimentar su alma”, explica la coach Camila Díaz.
Pero, precisamente, ese corre-corre puede hacer que no nos demos cuenta exactamente de qué nos haría felices.
El coach Fernando Meneses explica cuáles son esas pequeñas cosas que alimentan el alma y que vale la pena cultivar: