Ante el aumento reciente de casos de moquillo en perros en Bogotá, Tolima y San Andrés, Vanguardia consultó con expertos para ofrecer una guía que le permita cuidarlos para evitar el contagio de esta enfermedad.
Tan pronto como trae a un nuevo cachorro a su vida, su mascota se convierte en una prioridad y depende de usted aprender sobre las enfermedades caninas que pueden comprometer su salud y bienestar.
Y es especialmente importante aprender sobre enfermedades altamente contagiosas y a menudo fatales como el moquillo, que actualmente azota a las mascotas en Bogotá, Tolima y San Andrés, pero que fácilmente puede extenderse a otras ciudades, incluida Bucaramanga.
El moquillo o enfermedad de Carré es una infección viral grave y con frecuencia mortal que afecta a perros y animales salvajes como zorros, zorrillos y mapaches.
Junto con el parvovirus, es una de las enfermedades más graves que puede contraer su perro.
Los caninos de cualquier edad pueden contraerla, pero los cachorros son particularmente susceptibles y la causa es el paramixovirus, responsable de otras enfermedades animales mortales.
Por lo general, la enfermedad ataca el sistema respiratorio, pero algunos paramixovirus afectan el sistema nervioso, e incluso el sistema reproductivo.
El moquillo es uno de los pocos paramixovirus para los que existe una vacuna.
La transmisión del moquillo en los perros puede ocurrir a través del contacto directo con un animal infectado, incluso de madres a cachorros por nacer, a través de la placenta. También se transmite por el aire, por lo que cuando un perro infectado ladra o estornuda, la enfermedad se puede propagar rápidamente a las superficies circundantes donde se puede contraer, o se puede transmitir directamente por el aire.
La vida silvestre también puede transmitir el moquillo a los perros.
Cuando un perro tiene moquillo, puede eliminar el virus y ser contagioso durante meses, incluso si no muestra síntomas.
Afortunadamente, el virus que causa el moquillo en los perros no dura mucho una vez que está en el medio ambiente y es fácil de matar usando desinfectantes regulares.
Por su parte, los síntomas iniciales del moquillo suelen ser más parecidos a las alergias: ojos llorosos o llenos de pus y secreción nasal, pérdida del apetito y un cambio en su comportamiento: se vuelven letárgicos y comienzan a tener fiebre. Su perro puede toser y experimentar diarrea o vómitos de tres a seis días después de la infección. Prevenir y recibir tratamiento para el moquillo en perros lo antes posible es vital.