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¿Sufre de nacidos o abscesos? Así puede curarlos con remedios caseros
- Estas infecciones suelen surgir a raíz de pequeñas heridas en la piel, convirtiéndose en un terreno fértil para que las bacterias presentes en la dermis ingresen al tejido subcutáneo. Foto: Archivo/Vanguardia
Se le conoce comúnmente como “nacido”, pero en el ámbito médico se refieren a él como absceso. Esta afección cutánea es conocida por sus molestos síntomas que se manifiestan en una cavidad donde se acumula pus, y puede surgir en casi cualquier parte del cuerpo.
La Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., a través de su servicio de información en línea MedLine Plus, explica que un absceso se forma cuando el sistema inmunológico combate una infección. En respuesta, los glóbulos blancos se concentran en el área infectada, provocando inflamación en el tejido dañado.
Estas infecciones suelen surgir a raíz de pequeñas heridas en la piel, convirtiéndose en un terreno fértil para que las bacterias presentes en la dermis ingresen al tejido subcutáneo. No obstante, no solo las cortadas pueden ser las causantes: una mala higiene, el acné, el eczema o el uso compartido de artículos de aseo con alguien que tiene un absceso también aumentan el riesgo.
Si el absceso es profundo puede manifestarse con dolor local, sensibilidad al tacto y síntomas generales como fiebre, pérdida de peso y fatiga.
El Manual Merck de diagnóstico y terapia detalla que entre los síntomas más comunes se encuentran el dolor, calor, hinchazón, dolor al tocar y enrojecimiento, así como fiebre.
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Tratamiento del nacido
Respecto al tratamiento, el Manual de Merck indica que su elección depende del tipo de absceso. Mientras que los menores podrían solucionarse con un pequeño corte y drenaje, los profundos (de más de 5 cm) requieren de procedimientos más exhaustivos como el aislamiento con compresas o la colocación de drenajes.
Pese a los métodos tradicionales, no son pocos quienes optan por remedios caseros para abordar esta afección. Algunas recomendaciones incluyen el uso del aceite de árbol de té, gracias a sus propiedades antisépticas, y las sales de Epsom, que pueden secar el pus y ayudar en el drenaje del absceso.
Asimismo, existe la opción de ungüentos antibióticos de venta libre que pueden ser efectivos, pero es crucial consultar al médico antes de su uso.
En resumen, aunque los “nacidos” o abscesos son comunes, es esencial entender su origen y buscar un tratamiento adecuado, ya sea médico o casero, siempre bajo supervisión profesional.