Jefferson Tapias Velásquez disparó contra el patrullero Leonardo Gutiérrez Ortega el pasado 9 de febrero en Barrancabermeja. El uniformado sobrevivió y el agresor fue capturado.
Un juez de conocimiento aprobó el preacuerdo realizado entre la Fiscalía y el procesado Jefferson Tapias Velásquez, y lo condenó a 11 años y 8 meses de prisión, como responsable de fabricación, tráfico, porte de armas en concurso heterogéneo con homicidio agravado en grado de tentativa, violencia contra servidor público y uso de menores para la comisión de delitos en calidad de coautor a título de dolo.
Ante el material probatorio con el que contaba el ente acusador, el investigado admitió su culpabilidad en los hechos ocurridos el 9 de febrero de 2020 en el sector del puente elevado de Barrancabermeja, donde en compañía de un menor de edad, atentó contra la vida del patrullero Leonardo Gutiérrez Ortega.
Según informó el Coronel Gustavo Adolfo Martínez, comandante del Departamento policía del Magdalena Medio, la persecución inició cuando una patrulla detectó el vehículo sospechoso en el que se movilizaban dos hombres y emprendieron la huida apenas vieron a las autoridades.
“Inicialmente un cuadrante en el Centro detectó la moto que tenía las placas tapadas y se inició una persecución y un plan candado. Una patrulla se ubicó en el sector de pozo siete y le cerraron el paso” informó el oficial.
Sin embargo, al verse acorralados por el patrullero Gutiérrez y su compañero, uno de los sospechosos les disparó y escaparon.
“Los policiales se bajaron y fueron recibidos con disparos por parte del tripulante de esta motocicleta”, añadió Martínez.
Gutiérrez Ortega recibió el impacto de bala en la parte derecha del pecho y en una patrulla fue auxiliado y trasladado hasta un centro clínico en donde fue intervenido quirúrgicamente .
Según el Coronel, la moto en que se movilizaban los delincuentes fue dejada abandonada.
