El cadáver de la víctima, identificada como Josué Estupiñán Peña, de 60 años, fue encontrado amarrado y con signos de violencia. Autoridades Investigan un posible hurto como móvil.
Atado de pies y manos con cordones de zapatos, semidesnudo, en el piso de una habitación, fue encontrado el cuerpo sin vida del empresario Josué Estupiñán Peña, de 60 años de edad, el pasado domingo.
La macabra escena quedó al descubierto aproximadamente sobre las 3:00 de la tarde, cuando una hermana de la víctima llegó hasta una exclusiva vivienda de la carrera 38 con calle 46 del barrio Cabecera del Llano, en Bucaramanga, en donde este residía y tenía su empresa.
Se presume, por el grado de descomposición en el que estaba el cadáver, que el crimen habría ocurrido entre el pasado viernes o sábado.
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Residentes de la zona informaron a Vanguardia que Estupiñan Peña, quien desde hace varios años vivía solo en el predio, fue visto por última vez el pasado jueves en la noche
“El jueves hablé con él, como a las 7:00 de la noche, salió a pie a verse con un amigo. A eso de la medianoche del viernes llegó con un man, ambos venían borrachos. Luego no vi salir a ninguno, ni supe más hasta que el domingo lo hallaron muerto. Este hombre con el que entró era bajito, más o menos joven. Josué entraba siempre a varios hombres a la casa”, aseguró un testigo del hecho.
Reportado el hallazgo del cuerpo, investigadores de la Sijín se trasladaron hasta el inmueble, en donde además funciona una empresa de paneles solares y energías renovables propiedad de Estupiñán Peña, y durante cerca dos horas recopilaron evidencias.
Un posible hurto
Los primeros indicios, según las autoridades, apuntan a que el homicidio fue el resultado de un hurto.
“Toda la casa estaba revolcada, se llevaron objetos valiosos y una camioneta Mazda CX-5 (de placas UDW-032). A él lo encontraron en el piso, desnudo y amarrado. Para sacar la camioneta necesitaban el control remoto con el que se abría el portón y Josué era el único que lo cargaba siempre, salía a pie y llevaba consigo ese control”, agregó la fuente.
Luego de un operativo de búsqueda desplegado por la Policía, este vehículo fue hallado abandono en la noche del mismo domingo en Piedecuesta.
En la vivienda en la que ocurrió el asesinato había varias cámaras de seguridad, sin embargo, él o los asesinos hurtaron el DVR donde se almacena la información de las mismas.
Con un objeto contundente
La inspección técnica a cadáver arrojó como resultado inicial que el hombre de 60 años fue asesinado con un objeto contundente. Tenía un golpe en la región nasal, hematomas en codos y hemorragia en nariz.
El cuerpo fue sacado de la residencia y llevado a Medicina Legal, seccional Bucaramanga, donde se determinará con exactitud el mecanismo de muerte.
Entre tanto, la Policía continúa con la investigación para lograr identificar a los responsables de este hecho.
De Josué Estupiñán esta redacción conoció que era de profesión técnico industrial, soltero y era oriundo de San Gil, Santander.
