Cansado de que Joseph Celis lo atacara con un cuchillo, un hombre decidió armarse y dispararle para acabar con la disputa. Ahora uno está en el cementerio y el otro en prisión.
Disputas por el consumo de estupefacientes fueron las causas de un nuevo homicidio en Bucaramanga al que las autoridades calificaron como un hecho de intolerancia social.
La muerte violenta se presentó este miércoles al mediodía en el barrio Miraflores, en la vía a Pamplona, donde la víctima: Joseph Johan Celis López, de 26 años, recibió cuatro impactos de bala en la cabeza, la espalda y al costado izquierdo del tórax.
Su homicida, quien fue capturado por la Policía, al parecer decidió dispararle cansado por las constantes lesiones con armas cortopunzantes que Joseph le propinaba cada vez que se encontraban en el sector.
En el momento del asesinato coincidieron sobre un sector de escaleras de ingreso al barrio Miraflores.
Una vez más pretendía atacarlo con un cuchillo y causarle las heridas. Pero en esta ocasión, el hoy detenido iba armado y al primer intento de agresión, desenfundó un revólver y no dudó en accionarlo.
El sujeto, después de atentar contra Celis López, emprendió la huida a pie, pero una patrulla del cuadrante que escuchó las detonaciones inició la persecución y lo capturó cuando salía del barrio con el arma de fuego, calibre 38 milímetros, aún en su poder.
Las autoridades están a la espera de la legalización de captura para dar más detalles del hecho. Del occiso y su homicida se conoció que presentaban antecedentes por los delitos de tráfico de estupefacientes, fuga de presos y porte de armas de fuego.
