Desde el pasado 30 de mayo el buque del Instituto Español de Oceanografía rastrea el litoral de Tenerife en busca de algún rastro de Olivia y de Anna.
El cadáver de una menor aparecido ayer en el mar, sería el de la mayor de las dos niñas desaparecidas en la isla atlántica española de Tenerife, informaron fuentes de la investigación.
Las niñas son de uno y seis años de edad y desaparecieron en las islas Canarias el pasado 27 de abril con su padre, después de que éste no las devolviera a la madre a las 9:00 de la noche, como tenían pactado.
Fuentes próximas a la investigación explicaron que se hallaron dos bolsas, en una de ellas estaba el cuerpo sin vida que podría ser de la hija mayor, Olivia, y la otra estaba vacía.
El hallazgo ya fue comunicado a la madre y a la familia de las menores. La zona de búsqueda elegida fue acordonada a partir del geoposicionamiento del teléfono celular del hombre desaparecido la noche de ese día, cuando se hizo a la mar en dos ocasiones.
El cadáver fue encontrado en el mar por el buque oceanográfico que rastreaba la zona donde se perdió la conexión del teléfono del padre. Las autoridades recuerdan que hay que esperar a la identificación del cadáver, que certificará la autoridad judicial.
Mientras tanto las fuerzas de seguridad prosiguen en la zona los trabajos de rastreo.
El padre de las menores fue visto por última vez en la marina de Santa Cruz de Tenerife cargando su lancha con varias bolsas y llegó a zarpar hasta en dos ocasiones, aunque nunca fue visto con las menores.
El TSJC indica que el cuerpo fue trasladado a tierra sobre las 18.00 horas y llevado al Anatómico Forense para el levantamiento.
