Debido al ritmo de contagio y el elevado porcentaje de mortalidad del Coronavirus, Italia encabeza la cifra de víctimas en el mundo.
Miércoles 18 de marzo. Al caer la tarde, cerca del cementerio de Bergamo, se formó una larga la fila de camiones del Ejército escoltados por carros de la Policía. Son los furgones empleados para transportar los 65 ataúdes que tendrán como destinación final los hornos crematorios de otras ciudades.
Estas víctimas del Coronavirus, además de morir solas, serán cremadas fuera de su lugar de residencia, haciendo aún más dolorosa la situación de los familiares que tendrán que esperar a que todo haya terminado para disponer de las cenizas de sus allegados.
Era una decisión a la que se iba a llegar tarde o temprano. La morgue del hospital, las funerarias, la iglesia del cementerio y la inmensa carpa de la Protección Civil ya no dan abasto para recibir tantos féretros. Tampoco el horno crematorio. Dicen que pareciera un horno industrial, de esos que están prendidos las 24 horas del día, sin pausas dominicales.
El contagio y las muertes por Coronavirus no dan tregua. Y no obstante la prohibición de salir de casa, miles de italianos han tomado las cosas a la ligera. En una semana de decreto han sido sancionadas casi 50 mil personas superando el número de personas contagiadas. Entonces en Italia tenemos otro gran problema: hay más irresponsables que enfermos.
Aunque si inicialmente el Gobierno no limitaba la posibilidad de salir de casa para trotar o hacer una corta caminada en algún parque, probablemente será vetada cualquier actividad deportiva al aire libre.
Tratando de evitar que haya tanta gente fuera de casa, el Gobierno ha decidido prorrogar la validez de algunos documentos: la cédula de ciudadanía y la licencia de conducción serán válidas hasta el 31 de agosto próximo; la revisión de los vehículos podrá ser hecha antes del 31 de octubre; fue aumentada de 30 días la cobertura del seguro de responsabilidad civil de vehículos y los médicos podrán comunicar por vía telemática los códigos de las recetas de medicamentos, sin necesidad de ir hasta el consultorio.
Y aunque si aún no ha sido confirmado, muy probablemente los estudiantes regresarán a clases el 2 de mayo próximo y no el 3 de abril como previsto.
