El Gobierno del presidente venezolano Nicolás Maduro aseguró que Francia, que ayer se sumó a la iniciativa de seis países para denunciar a la nación suramericana ante la Corte Penal Internacional CPI por presuntas violaciones a los derechos fundamentales, le ataca con fines populistas.
A través de un comunicado, la Cancillería venezolana acusó a la nación europea de sumarse a la iniciativa en su contra ante la CPI, con sede en La Haya, “para mejorar la desprestigiada imagen del presidente (Emmanuel) Macron y su Gobierno”, un acto que, señala, “se asemeja al mejor estilo racista de la ultraderecha francesa”.
En tal sentido, Venezuela manifestó “su más contundente rechazo a la actitud injerencista e intervencionista” del Gobierno francés, y recordó que ambos países “comparten históricos vínculos sociales, económicos, políticos y culturales, alentados a través de los años a partir del respeto y la cooperación”.
“La arrogante actitud asumida por el Gobierno francés impacta negativamente las buenas relaciones que ambos países han sostenido por décadas”, se añade en el texto venezolano.