Publicidad

mundo
Miércoles 31 de julio de 2019 - 12:00 PM

Sánchez, fuera de foco

En un punto muerto político se encuentra el país europeo, que está a un paso de repetir elecciones en un año. La falta de un gobierno de coalición abre un escenario impredecible en España.

Compartir
Imprimir
Comentarios
Internet / VANGUARDIA
Internet / VANGUARDIA

Compartir

Internet / VANGUARDIA

Internet  / VANGUARDIA
Internet / VANGUARDIA

Internet / VANGUARDIA

El Gobierno español está en el limbo político. Pedro Sánchez, el jefe en funciones del Gobierno español, no ha podido ser investido debido a la falta de consenso con otros partidos políticos para armar coalición.

Luego del fracaso del pasado 25 de julio, cuando no pudo ser investido como presidente del Gobierno tras la abstención del partido Unidos Podemos, el líder socialista tiene aún hasta el 23 de septiembre para intentarlo.

Ahora comienza la cuenta regresiva de dos meses para llegar a un acuerdo, y si no... a elecciones.

Los comicios quedarían convocados automáticamente para el 10 de noviembre próximo, que serían los cuartos en cuatro años en España. Los últimos se celebraron a finales de abril pasado.

Isaac A. Calvo, periodista y analista internacional español, considera la situación muy complicada porque parece que Sánchez quiere obtener los apoyos para gobernar, pero, prácticamente, sin ofrecer nada a cambio.

En ese orden de ideas, explica que Unidas Podemos, el partido de izquierda que lidera Pablo Iglesias, quiere puestos de relevancia a cambio de dar su apoyo.

Pero remarca que este apoyo es insuficiente para garantizar estabilidad política porque entre el PSOE y Podemos no hacen mayoría absoluta (ver recuadro).

“Este es uno de los argumentos socialistas y el PSOE, aunque es arriesgado, no ve mal convocar a unas nuevas elecciones, ya que, según las tendencias, los comicios pueden dar más peso a Pedro Sánchez y quitárselo a Podemos”, indica Calvo.

Si bien señala que este tipo de situaciones están previstas, según su criterio, no son buenas, porque causan incertidumbre política y económica, “además de cierto hartazgo en la población, que ve cómo parece que prima más el interés personal de los políticos que el bien común”.

Igualmente, ve difícil conseguir los apoyos, porque PP y Ciudadanos se niegan a apoyar a Sánchez y lo acusan de dejarse apoyar por nacionalistas, independentistas y proetarras.

En su opinión, “lo más estable y beneficioso para España sería un gran pacto de Estado, honesto y leal, entre PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y PP (Partido Popular)”.

Actitud “soberbia”

Jaime Rendón, docente investigador de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad de La Salle, concuerda con esa idea, y apunta que no se ha logrado una coalición de gobierno por “la actitud soberbia de Sánchez”.

En ese sentido, dice que el actual presidente español pretende que se haga la coalición de gobierno, a partir de sus ideas y sus intereses, sin darle juego a otros partidos políticos. Y agrega que mientras Sánchez mantenga esa actitud, donde el PSOE sea el único que está gobernando, no será capaz de armar un gobierno progresista como él quiere, y no tendrá más remedio, que ir de nuevo a elecciones.

Aunque resalta que España nunca ha tenido un gobierno de más de un partido, subraya que ahora hay una nueva realidad política y el sistema político les obliga a negociar.

Fin del bipartidismo

Hay que recordar que el sistema político español es parlamentario, y hasta la crisis de 2008 el país tenía un sistema bipartidista, recuerda Ángelo Flórez, internacionalista y profesor de la Universidad de Santo Tomás.

Se repartían el poder dos partidos. En principio la UCD y el PSOE, y luego el PP y el PSOE. Pero con la crisis de 2008, por el lado de la izquierda le surge un rival al PSOE, el partido Podemos, y por el lado de la derecha, dos rivales, Ciudadanos y VOX hasta hace dos años, explica.

Ahora, además hay otros movimientos fuertes como los catalanes y vascos, precisa Flórez, haciendo alusión a que la época del bipartidismo en donde el PSOE y el PP se alternaban el poder en España durante 40 años, ya pasó.

Por esa razón, que en 2016 hubo elecciones repetidas rápidas en España, debido a que no se alcanzaba un acuerdo político.

“Entonces esa crisis de los partidos, que es generalizada en Europa, especialmente en el sur de Europa, en Grecia y Francia, y el caso de España se empiezan a desgastar esos partidos tradicionales”, insiste.

Es más, identifica dos problemas adicionales en España. El primero de ellos, es un país en que no había gobiernos de coalición porque era bipartidista y solo necesitaba apoyos de uno o dos movimientos pequeños como el vasco o el catalán; y en segundo lugar, esos partidos nacionalistas se radicalizan, y por lo tanto el PP como el PSOE empiezan a verlos con recelo, y se entra en una crisis de gobernabilidad.

En este momento, si bien el PSOE de Sánchez tiene la mayoría de escaños, no tiene los suficientes para gobernar en solitario, y lo que tiene que hacer es buscar aliados, plantea el internacionalista.

El socio natural del PSOE es Podemos de Iglesias, que está sugiriendo que formen un gobierno de coalición, lo cual implica dar ministerios a cambio, pero ante la falta de negociación, Flórez prevé que lo más seguro es que España vaya a elecciones de nuevo en menos de un año.

Por el momento, no hay garantías de que España pueda salir del punto muerto en el que se encuentra.

Elija a Vanguardia como su fuente de información preferida en Google Noticias aquí y únase a nuestro canal de Whastapp acá.

Publicado por

Publicidad

Publicidad

Tendencias

Publicidad

Publicidad

Noticias del día

Publicidad