La imprudencia de una turista en México le podría salir bastante cara. La mujer, que subió a una pirámide en la que está prohibido su ingreso, fue recibida por los turistas con chiflas y golpes. Ocurrió en el parque arqueológico de Chichén Itzá
Una turista subió a la pirámide de Chichén Itzá, o templo de Kukulcán, a la que está prohibida subir desde el año 2008 por disposición del gobierno de México.
Por motivos de conservación, en esta Maravilla del Mundo no se puede ingresar, pero la mujer hizo caso omiso a las recomendaciones y llegó a lo más alto de la pirámide.
En videos compartidos en redes sociales se ve a la mujer en lo más alto de la pirámide. Un guardia de seguridad tuvo que subir también para pedirle que bajara.
Cuando por fin salió de la pirámide, los turistas indignados la chiflaron, le arrojaron agua y hasta la ‘mechonearon’.
El gobierno de México estipula que quien rompa la regla de conservación de patrimonio debe pagar una multa cercana a los $2.560 dólares, casi 12 millones de pesos colombianos.