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Alvaro Beltran Pinzón
Domingo 01 de mayo de 2022 - 12:00 PM

Barrancabermeja, 100 años

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“Primero fue el agua y luego el petróleo”, ha dicho el alcalde Alfonso Eljach Manrique, seguramente con la intención de resaltar la trascendencia de las corrientes y reservorios que circundan a Barrancabermeja. En efecto, desde el 12 de octubre de 1536, cuando el conquistador español Gonzalo Jiménez de Quesada se asentó allí en su travesía aguas arriba del río Magdalena para continuar por tierra su expedición hacia el altiplano cundiboyacense en la búsqueda de El Dorado, La Tora ha sido centro logístico del desarrollo nacional.

Su despegue industrial se dio a partir de 1916, cuando la Tropical Oil Company compró a Roberto De Mares la concesión otorgada en 1905 para explotar yacimientos petrolíferos entre los cauces de los ríos Sogamoso y Carare hasta su desembocadura en el Magdalena y la cordillera Oriental. Para 1922 ya se habían perforado 24 pozos y construido los oleoductos Infantas-Barrancabermeja y Refinería-Puerto Galán, y en febrero se inició la refinación de crudo.

Aunque no reunía los requisitos para obtener la condición de municipio, mediante la Ley 5ª del 27 de enero de 1922, el Congreso de Colombia autorizó a la Asamblea Departamental erigirlo en razón a la excepcional relevancia de la localidad. La Ordenanza 13 de ese mismo año le dio vida política y permitió que, el 26 de abril, se suscribiera el acta de inauguración.

Su pujanza despertó recelos en San Vicente, municipio desmembrado; en Zapatoca, capital de la provincia; y en Bucaramanga, capital del departamento. A lo largo de su existencia se han presentado discrepancias, brotes de ingobernabilidad, rivalidades y, también, iniciativas de independencia.

Fueron visionarias las apreciaciones de Manuel Serrano Blanco, autor de la ordenanza de su creación, quien, en 1941, estimó que Barrancabermeja debería tener un estatuto particular de gobierno, el cual solo se vino a hacer realidad en 2019 al serle otorgada la categoría de Distrito Especial Portuario, Biodiverso, Industrial y Turístico. Respecto a los temores de que la capital pudiera ser absorbida por el joven ente territorial, expresó “son dos cosas distintas dentro de su grandeza e importancia patria: Barranca es la civilización, Bucaramanga es la cultura”.

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