La situación de Metrolínea empeora, sus finanzas se hacen más exiguas, su personal se acorta, su flota se esfuma, sus paraderos y estaciones se oxidan, se desmantelan y se desploman, sus deudas crecen y los usuarios desaparecen.
Alvaro Ordoñez
Alcaldes fantasmas
El alcalde de Girón fue retirado de su cargo por doble militancia, nadie sabe cómo actuar y mientras tanto el municipio quedó en un limbo en el que aparentemente gobierna alguien en cuerpo ajeno, esta modalidad tan usada en nuestro país es peligrosa pues invita a todas las formas de corrupción, ojalá prontamente las autoridades resuelvan esta situación por el bien del municipio.
Más grave es el tema de otras ciudades del área donde pareciera que el alcalde de turno no existe, es el caso de Floridablanca donde no se ve, ni se sabe, ni se comenta a que se dedica la actividad oficial de un municipio que cobra muchos de los impuestos más altos del país y en donde tanto bajo perfil empieza a ser sospechoso. El municipio viene de ser asaltado literalmente en sus finanzas por anteriores administraciones sin que las entidades encargadas de velar por el cuidado de los dineros públicos entreguen resultado alguno, su malla vial ya no parece ni vial ni malla, el desorden en la movilidad ni hablar, basta con tratar de transitar por el parqueadero público en que se convirtió Cañaveral, o la transversal del bosque, ni hablar de los alrededores de la plaza de Mercado y el parque principal, la seguridad y el transporte pirata al igual que en toda el área metropolitana son un verdadero reto. Deja mucho qué pensar que se recomiende no transitar por la vía de tres esquinas entre Ruitoque y Ruitoque bajo en horas de la noche por el alto nivel de atracos que se vienen presentando o lo peligroso que puede ser transitar por algunos barrios del municipio.
Si hay alcalde sería bueno verlo, saber a qué se dedica y que nos cuente cuáles son sus propuestas para los temas de la vida cotidiana de la ciudad, tenemos derecho a los mínimos vitales pagamos impuestos muy altos y cada día se va haciendo imposible llegar a nuestras casas o por las vías o por el peligro que representa transitar por ellas.
Lógicamente es importante evitar los escándalos a los que nos acostumbraron otras administraciones, pero hay que actuar. Razón para la creación del Distrito metropolitano.