jueves 04 de febrero de 2021 - 12:00 AM

Alvaro Ordoñez

Defensa populista

Estoy de acuerdo en que quizás este no sea el momento para pensar en una revocatoria, pero sí es el momento para que la administración municipal entienda que no está respondiendo a las expectativas de los ciudadanos
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Columna de
Alvaro Ordoñez

La defensa del señor alcalde a su gestión sonó demasiado populista en la audiencia para el análisis de la revocatoria planteada por la oposición. No dio la impresión de ser ese funcionario técnico que buscamos para que fuese el líder de los servidores públicos, más bien se pareció a su principal contradictor y antiguo promotor, atacando a sus detractores y utilizando los más viejos argumentos de politiqueros, acorde a sus nuevos amigos del concejo.

Estoy de acuerdo en que quizás este no sea el momento para pensar en una revocatoria, pero sí es el momento para que la administración municipal entienda que no está respondiendo a las expectativas de los ciudadanos, que si bien no fue elegido para ser títere de nadie, sí lo fue para desarrollar la ciudad escuchando con la humildad de un verdadero servidor público y no con la arrogancia y soberbia que tanto le molesta de su promotor.

La ciudad requiere soluciones a temas prioritarios de gestión y planeación, la movilidad es un desastre y la administración de tránsito no se ve, quizás la directora no sale a las avenidas y calles de la ciudad para ver los vehículos parqueados en todas partes, la invasión del transporte pirata y la congestión que nuestra importante y muy bien utilizada red de ciclovías ha logrado generar, muchas promesas de inversión y expectativas pero la malla vial es una desgracia, la invasión del espacio público llega a su más alta densidad, la sensación de inseguridad en las gentes nunca vista y una ciudad que se caracterizó por tener un bajo desempleo hoy es de las que mayor desocupación e informalidad presenta.

Reacción y no acción es lo que se ve, no creo que sean las actitudes del gobierno local el resultado de un plan claro con metas y logros definidos y la debida coordinación de un líder que todos los que lo apoyamos desinteresadamente esperábamos, mucho asesor, mucha nómina, mucho gasto de funcionamiento, pareciera más del mismo circo con distintos actores.

Aún es tiempo de retomar un camino diferente, pero si gobernar es hacer, la ciudad quiere ver acciones y no promesas, una administración práctica y técnica.

Este artículo obedece a la opinión del columnista. Vanguardia no responde por los puntos de vista que allí se expresen.
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